viernes, 28 de enero de 2011

¿La presión de contraer matrimonio es cuestión de género?

Estar soltera después de los treinta años es uno de los prejuicios que deben enfrentar muchas mujeres. El famoso reloj biológico y la autocrítica constante son temas que atormentan a la mujer de hoy, sobre todo por los prejuicios de nuestra sociedad.
Mientras los hombres no se preocupan tanto por casarse, a las mujeres siempre se les recuerda que se les está "yendo el tren" o que la maternidad tiene fecha de caducidad.
Las exigencias aumentan…
Es muy usual que al llegar a los treinta años las mujeres se pongan más exigentes en la elección de sus parejas, mientras que los hombres todavía no tienen la madurez suficiente como para asumir un compromiso, por eso ha postergado el hecho de casarse. Pero la diferencia es que el hombre puede postergar un tiempo más, en cambio para la mujer resulta un poco más complicado porque avanza el reloj biológico.
El hombre puede ir solo a matrimonios, a comidas, al cine, etc., en cambio la mujer no tiene esa misma sensación para socializar y conocer más gente. La mayoría dice "cómo voy a ir sola al matrimonio de tal persona". Habitualmente la persona que las acompaña es un conocido de años que no es un candidato a nada. Ahí surge una situación diferente: cuando están en la fiesta, se piensa en que no se puede dejar al otro solo y no se puede conocer más gente, entonces se transforma en una limitación.
Varias aristas
Lamentablemente todavía sigue estando socialmente establecido que las mujeres están hechas para tener hijos y cuidar a la familia. Y, por lo mismo, no es raro oír decir a éstas que no se han casado, y que aunque sean muy exitosas en el ámbito profesional, que se sienten solas y desean conocer a ese hombre especial; o bien quieren en demasía ser madres y formar una familia.
Por su parte, el soltero está feliz de poder manejar su vida a su propio modo, agradecen no tener que negociar el plan del día y poder manejar su dinero como mejor les parezca. La persona tiene que estar muy enamorado para casarse, sin depender de ser hombre o mujer, sin contar las presiones de la enamorada o enamorado de turno o exigencias laborales, que a veces les hace tomar la decisión de contraer matrimonio sin reales ganas de concretarlo.
A una mujer que cumplió treinta, hace rato y aún no se casa empiezan a lloverle las críticas.
Una mujer sola es mal vista socialmente, cuando en realidad no tiene nada de malo. La pueden tildar de frívola, egoísta y superficial. Un hombre que no se ha casado, para muchos, es un tipo libre, feliz, entretenido y buscador de sí mismo, siempre y cuando no haya pasado los 40 años, pues le pueden llover otro tipo de críticas.
Ellos, en cambio, sienten que mientras más maduro estén, más fácil será hallar pareja, por lo que el paso de los años no los preocupa, sino que más bien sería un gran aliado. Por lo tanto, no es raro que ellas sean las que se sienten solas sin pareja estable y a ellos no les preocupe mayormente.
Para la mayoría de las mujeres la entretención y los planes para divertirse van de la mano con la existencia de una pareja. Casi todo lo idean y piensan en dos: salir de vacaciones, ir al cine, tomarse un trago en un pub, etc. Los hombres son más arriesgados a la hora de salir solos, o simplemente se conforman con un buen partido de fútbol con los amigos el fin de semana.
Lo importante es disfrutar de la soledad ya que de seguro ésta será pasajera, y no privarse de las bondades de la vida por el hecho de no estar en pareja, arriesgarse a hacer cosas que nunca se han hecho.
¿Qué buscan tanto hombres como mujeres?
Una mujer de 30 años busca en un hombre seguridad, protección y fidelidad, por su parte el hombre busca admiración. La mujer necesita que el hombre sea romántico y detallista con ella, en cambio el hombre busca sentirse admirado, que lo vean fuerte.
Las mujeres tienen mucho temor a la maternidad por la responsabilidad que eso significa y el hombre enfrenta el temor de la responsabilidad económica.
En la parte sexual, el hombre se ve exigido porque antes la mujer no tenía idea de lo que era el sexo, pero hoy ellas se han dado cuenta de que tienen derecho a disfrutarlo. Frente a eso el hombre se siente más inseguro.
Cada cual debe tomar conciencia de cuáles son los temores y las cosas que les cuesta enfrentar, por ejemplo: temor al matrimonio, lo que produce que no resulten sus relaciones. Ver los tipos de relación que se ha tenido antes y cuáles son las expectativas de lo que se quiere de una relación de pareja.
Salimos a las calles de la ciudad de La Paz y realizamos a hombres y mujeres la siguiente pregunta:
¿La presión por contraer matrimonio es cuestión de género y de la edad?
Leí un comentario muy acertado de que muchas mujeres se casan antes de los 30 por miedo a quedarse solteronas y por eso eligen mal. ¡Que comentario más sabio!
María Ulloa
Yo tengo 25 años y la verdad tampoco quiero llegar soltero a los 30 y no por quedarme solteron, sino que hay otro dicho conocido "Soltero maduro, seguro es…" (risas), ¡por eso no quiero que digan eso de mi!
Francis Cardona
Si eres mujer y tienes 20 años te dicen:"para cuando el novio”, 25 años y aún eres soltera la personas que te rodean empiezan a apurarte para que consigas prometido, 27 años y soltera y empieza a agarrarles pánico por lo que dicen los demás de que "se te está pasando el tren". Es como te digo, a muchas les agarra ese apuro de casarse por dejarse influenciar por los ideales de la sociedad que están presentes en cada minuto de nuestras vidas.
Claudia Mancilla
No soy ése tipo de mujer... "soltera" no significa "estar sola"... yo soy soltera de 38 años sin hijos y con una relación estable de 15 años. A mi me tiene sin cuidado los comentarios de las demás personas porque de todas formas nunca dejan de hablar bien o mal y sobretodo la gente que no tiene vida propia.
Ruth Valle
Bueno yo tengo 35 años, yo me case a los 23 y no considero que porque me haya surgido la idea de quedarme solterona, gracias a Dios tengo un marido maravilloso que ama a mis hijos, a mi me pareció bueno casarme muy joven por dos razones una por ver a mis hijos crecer siendo yo joven, otra, no quise casarme jamás después de los 28 por que se nos complica a nosotras en el parto…
Marcia Escobar
Yo pienso que la gente se casa antes de los treinta porque son jóvenes, y eso quiere decir vulnerables e inocentes. Antes de los 30 aún crees que existe el amor perfecto y todos esos sueños románticos de la juventud. Después de los treinta ya hay otros intereses, otras razones mas importantes de porqué casarte. Ahí ya pones atención a que tu pareja sea, sana más que bonita, o tu novio fuerte y sobrio más que lindo. Se pone atención en la economía, si uno es profesional pues seguramente va a aportar mas dinero que el otro… Yo no creo que es el miedo a acabar soltera después de los treinta, es que ya no se entrega uno a la ciega en una relación y cuando le piensas demasiado pues no tiene caso estar casado. Yo creo que la gente joven se casa por falta de experiencia, por inocencia, y después por amor.
Ana María estrada
Una mujer de 30 es una mujer joven, los tiempos han cambiado, ya no es como en la época de nuestras abuelas que a los 20 si estabas en tu casa ya se te fue el tren, ¡para nada! la mujer de 30 que es soltera y ama su independencia no es que se quede solterona es porque ella escoge ser libre y no estar atada a nadie...

No hay comentarios:

Publicar un comentario