jueves, 21 de julio de 2011

¿Eres capaz de perdonar la infidelidad?

“Después de seis meses de casada, descubrí que mi esposo me había sido infiel en una salida en la que me dijo que iba con sus amigos. Accidentalmente encontré un mensaje en su celular, que decía, ‘¿cuándo volvemos a vernos?’. Lo que descubrí me duele mucho... me cuesta creerlo y no sé si podré perdonarlo”, lamenta Tatiana, quien hoy lleva dos meses de embarazo.

Para hablar de infidelidad, un tema muy amplio, y poder perdonar, primero se deben conocer los códigos depareja, coinciden los psicólogos Carlos Velásquez y Marianela Ramos. Ambos miembros de la relación deben hablar el mismo idioma cuando definen la infidelidad como tal. Y para poder perdonar, deben tener claro qué tipo de relación los une, si vale la pena seguir intentando y si están dispuestos a cumplir el compromiso que hicieron al iniciar la unión amorosa. Si no se aclara bien esto, podrían malinterpretarse algunas situaciones y justificarse otras.

¿Qué es la infidelidad? “Para unos, haber tenido sexo con otra persona; para otros, haberle dado un beso o haber salido con alguien. También haberse enamorado de una persona, aun cuando sea un amor platónico”, aclara Velásquez.

Lo mejor es conversar y exponer las molestias, las necesidades y los arrepentimientos, si éstos existen, para tratar de mejorar esta unión, asegura Ramos. Si esto no da resultado, es recomendable que intervenga una tercera persona, sea un familiar, amigo o un profesional, para que ayude a calmar y analizar la situación, y se determine si se puede y se quiere salvar la relación. Sólo entonces el perdón tendrá sentido.

La persona que fue traicionada debe entrar en un marco de razonamiento lógico para ver si es posible perdonar y, si decide hacerlo, debe ser de corazón. Esto significa olvidarlo todo, nunca echar en cara este desliz y aceptar que la pareja reconoce que se equivocó para iniciar una nueva página en esa historia. Por su parte, quien fue infiel debe arrepentirse de corazón y enmendar su error ganando nuevamente la confianza de la otra persona.

¿ES DIFÍCIL PERDONAR?

Carlos, de 34 años, cuenta que la chica con la que tuvo una relación de más de tres años, lo engañó con su mejor amigo. “Aunque fue en una fiesta donde circulaba la bebida, me lastimó mucho. Yo la amaba tanto que la perdoné. Dos meses después me enteré que volvieron a estar juntos y que hasta viajaron”. En este caso, la persona volvió a incurrir en la traición y, obviamente, es más difícil perdonar porque queda la duda de que ocurra una y otra vez, explica Ramos.

“Finalmente, decidí terminar con ella. Sufrí mucho, pero peor hubiera sido someterme a sus posibles nuevas infidelidades”, recuerda Carlos, que hoy tiene otra pareja.

Muchos infieles suelen incurrir en la traición porque les ha sido fácil obtener el perdón y cada aventura les resulta novedosa. Otros, realmente han comenzado a amar a otra persona y no se lo han dicho a su pareja por vergüenza, compromiso o lástima.

LA ETAPA DEL DESENCANTO

¿Por qué se da la infidelidad? Existen muchas causas, una de las principales es el desencanto. “Esta etapa se inicia cuando terminas de conocer a la persona y ves más sus defectos que sus virtudes”, expone Ramos. Por ejemplo, una vez que ha pasado la etapa de enamoramiento en la pareja, ésta se enfrenta a la realidad, olvidando a aquella persona que tanto idealizaba. De pronto, sus conductas ya no son placenteras en la convivencia, por lo que se defraudan las expectativas, según www.amor.com.mx.

Por otro lado, existe un abandono mutuo en la pareja, centrándose cada uno en sus objetivos personales y no así en los de ambos. En esta situación, la aparición de un tercero puede que los haga sentir más valorados y se elige inconscientemente como nueva compañera.

Otro posible motivo es la monotonía: uno de los más grandes enemigos de la relación de pareja. Un matrimonio o un noviazgo sumido en la rutina y en el aburrimiento es más vulnerable. Si llega alguien que ofrece un panorama distinto, lleno de encantos, novedades, riesgos y demás cosas de las que actualmente carece la relación conyugal, es muy probable que se acepte.

La vida sexual deficiente también es una de la causas importantes, aunque no es el único elemento en que se basa una pareja. Cuando una de las partes no se siente satisfecha sexualmente, tiende a buscar fuera de la relación aquello que no encuentra en su vida cotidiana, a pesar del amor que siente. Por estas y otras razones es que se deben analizar las circunstancias en las que ocurrió la infidelidad. De todas maneras, es bueno aclarar que ninguna de estas causas la justifica, pues siempre implica deslealtad y falta de honestidad.

Pregúntate

— ¿En qué circunstancias fue infiel?
— ¿Tenía antecedentes de infidelidad antes de iniciar la relación seria?
— ¿Eres capaz de perdonar y olvidar?
— ¿Incurriría en el mismo error si lo perdonas?
— ¿Crees que te ama de verdad?
— ¿Tu relación está bien o se desgastó?
— ¿Quieres continuar con tu pareja, pese a todo?
— ¿Quiere ella seguir contigo?

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. La verdad, no, la traicion no se puede perdonar, sin embargo la ultima ves que estuve en una relacion fue hace a~os, despues de ese fracaso decidi no entrar en las sendas del amor nuevamente y logre hacer del trabajo un addicion, por que adecir verdad no tengo nada mas por que vivir solo para trabajar la verdad no lo considero malo dado que me gusta el dinero pero bueno. Despues de que descubri la infidelidad, ya era un hecho que terminaria la realcion pero antes de la darle la noticia me dedique a conversar el porque la infidelidad, la conversacion nunca llego a nada al final nunca supo decirme el por que o yo no supe entender tal vez quien sabe, pero igual termino.
    Personalmente debo decir que en esto soy algo anticuado, creo que el ser humano es un animal de costumbres y asi como esto en lo que es tracion me voy al extremo en lo medieval digamoslo asi, para yo perdonar una traicion de cualquier tipo, es casi que dar tu vida lo cual lo traduzco como sacrificar algo realmente grande, pero yo dificilmente daria un chance de reinvindicarse, hasta el momento en mi vida nadie vale la pena.

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