EL PLACER PUEDE ENTRENARSE
La fó́rmula está́ en los ejercicios que dan más flexibilidad a la pelvis, relajan los glú́teos y las piernas, y mejoran la conexió́n personal.
El objetivo de los ejercicios sexuales, de acuerdo a la Universidad de Princeton, es tonificar y fortalecer los músculos pubococcígeos que ayudan a tener mejores orgasmos.Éstos pueden ser realizados a cualquier hora del día, en el preludio o durante el sexo.
Este artículo refleja el trabajo de investigación realizado por la licenciada Diana Resnicoff, psicóloga y sexóloga clínica, miembro de la Federación Latinoamericana de Sexología y Educación Sexual. Quien nos presenta cuatro tipos de ejercicios que te ayudarán a mejorar esos momentos de intimidad.
1. Rotación de la pelvis.
Parada, con las piernas abiertas y las manos en la cintura, realizar círculos sobre el eje del cuerpo, con cuidado de no levantar los hombros.
2. Balanceo de la pelvis.
Acostada boca arriba, inspirar y balancear la pelvis hacia atrás, arqueando la parte inferior de la espalda.
Al exhalar, dejar que la pelvis vuelva lentamente hacia adelante.
Realizar el ejercicio muy lentamente, manteniendo la pelvis levantada.
El beneficio extra: ayuda a aliviar los dolores menstruales.
3. Elevació́n de pelvis.
Acostada boca arriba, con las rodillas flexionadas y levantadas, inspirar
y balancear levemente la pelvis ar- queando la parte inferior de la espalda. Al largar el aire, levantar ligeramente la pelvis, comenzando por el sacro, hasta que se separe del suelo. Continuar el movimiento, levantando vértebra por vértebra, hasta quedar apoyada solamente por los hombros y los pies.
Volver a la posición inicial con un movimiento lento y suave.
4. Rotació́n de caderas.
De pie, con las piernas separadas
y levemente flexionadas, y las manos en las caderas, rotar la pelvis varias veces hacia atrás y hacia ambos
lados. Luego, repetir la misma secuencia hacia adelante.
Las claves de este ejercicio: que las caderas -y no las piernas- guíen el movimiento y mantener los muslos y los glúteos relajados.
La recomendación es realizar las se- cuencias varias veces y en los casos en que sea necesario, hacia ambos lados. Y, después, sólo pensar en gozar.
martes, 29 de septiembre de 2015
Lo que aprenderá de las relaciones a distancia
Las relaciones a distancia son un dulce desafío en el que puede triunfar el verdadero amor. No hay grandes diferencias entre las parejas que viven cerca y las que viven lejos, ambas se aman de igual manera. Sin embargo, aquellas personas que están a cientos de kilómetros muchas veces quieren escapar a los brazos de su pareja y no pueden, lo que es muy frustrante, pero con el tiempo aprenden a apreciar lo importante que es un gran amor sin importar las distancias.
Relación. Aprenderá a tomar decisiones difíciles, se convertirá en una persona muy creativa. Con el tiempo la confianza que ambos se tienen será realmente admirable.
Relación. Aprenderá a tomar decisiones difíciles, se convertirá en una persona muy creativa. Con el tiempo la confianza que ambos se tienen será realmente admirable.
Maneras en las que el aloe vera mejora su intimidad
El aloe vera no solo ayuda a cicatrizar heridas o mejorar el aspecto de la piel, sino que ayuda a prevenir o reducir el desarrollo de malestares que impiden una buena salud sexual.
Bondades. Previene la disfunción eréctil. El aloe vera tiene la capacidad para regular la circulación sanguínea, lo que ayuda a tener erecciones más duraderas. El gel que se extrae del aloe vera es considerado como un lubricante natural, por lo que previene irritaciones y relaciones sexuales más placenteras. Elimina las infecciones ocasionadas por hongos vaginales, de acuerdo con información publicada en el Atlas de plantas de la medicina tradicional mexicana de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). La aplicación directa del gel del aloe vera sobre las verrugas favorece su eliminación, tanto en la vagina como en los testículos e incrementa su resistencia física.
Bondades. Previene la disfunción eréctil. El aloe vera tiene la capacidad para regular la circulación sanguínea, lo que ayuda a tener erecciones más duraderas. El gel que se extrae del aloe vera es considerado como un lubricante natural, por lo que previene irritaciones y relaciones sexuales más placenteras. Elimina las infecciones ocasionadas por hongos vaginales, de acuerdo con información publicada en el Atlas de plantas de la medicina tradicional mexicana de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). La aplicación directa del gel del aloe vera sobre las verrugas favorece su eliminación, tanto en la vagina como en los testículos e incrementa su resistencia física.
Piropos, ¿positivos o negativos?
Qué mujer no ha escuchado alguna vez algún piropo en la calle, los cuales van desde los más románticos con frases como: "Qué dicha la de mis ojos que pueden apreciar tú hermosura", hasta los más groseros, por ejemplo: "Después de comerte, te chuparía hasta los huesos". ¿Será que los piropos pueden generar cambios positivos o negativos en la vida de las mujeres?.
Positivo o negativo. La psicóloga Sandra Bustamante indicó que "por lo general los piropos son positivos y levantan el ánimo, pero hay otros piropos que hacen sentir mal durante el día, debido a que tienen un autoestima frágil". La sexóloga Liliana Zabala mencionó que "no a todas las mujeres les gustan los piropos, porque algunos tienen connotación sexual ofensiva, aunque también están aquellos que exaltan la belleza de la mujer".
¿Por qué lo hacen?. Zabala comentó que es normal que los hombres piropeen y silben, ya que es una conducta innata e inherente en el varón. Además lo femenino les mueve "el piso" y les llama la atención. Asimismo, acotó que también existen mujeres que piropean a los hombres.
¿Acosos disfrazados de piropos?. Bustamante señaló que "depende del tipo de piropo, si los muchachos le dicen a las mujeres palabras bonitas como eres una estrella, no es acoso, no le faltan el respeto, pero si les dicen palabras groseras, estas son agresiones directas, no piropos", puntualizó.
Problema. "Cuando los hombres dicen pseudopiropos, agresiones verbales, es un hombre que tiene algún tipo de problema", apuntó la experta.
¿Qué deben hacer ellas? La psicóloga sostuvo que cuando una mujer es piropeada en la calle, debe evaluar la situación ya que no vale la pena bajarse al mismo nivel de la persona grosera. "Si son piropeadas no hay que incomodarse porque es normal. Si es un piropo obsceno lo mejor es no enojarse y alejarse del piropeador", puntualizó la sexóloga.
Positivo o negativo. La psicóloga Sandra Bustamante indicó que "por lo general los piropos son positivos y levantan el ánimo, pero hay otros piropos que hacen sentir mal durante el día, debido a que tienen un autoestima frágil". La sexóloga Liliana Zabala mencionó que "no a todas las mujeres les gustan los piropos, porque algunos tienen connotación sexual ofensiva, aunque también están aquellos que exaltan la belleza de la mujer".
¿Por qué lo hacen?. Zabala comentó que es normal que los hombres piropeen y silben, ya que es una conducta innata e inherente en el varón. Además lo femenino les mueve "el piso" y les llama la atención. Asimismo, acotó que también existen mujeres que piropean a los hombres.
¿Acosos disfrazados de piropos?. Bustamante señaló que "depende del tipo de piropo, si los muchachos le dicen a las mujeres palabras bonitas como eres una estrella, no es acoso, no le faltan el respeto, pero si les dicen palabras groseras, estas son agresiones directas, no piropos", puntualizó.
Problema. "Cuando los hombres dicen pseudopiropos, agresiones verbales, es un hombre que tiene algún tipo de problema", apuntó la experta.
¿Qué deben hacer ellas? La psicóloga sostuvo que cuando una mujer es piropeada en la calle, debe evaluar la situación ya que no vale la pena bajarse al mismo nivel de la persona grosera. "Si son piropeadas no hay que incomodarse porque es normal. Si es un piropo obsceno lo mejor es no enojarse y alejarse del piropeador", puntualizó la sexóloga.
jueves, 24 de septiembre de 2015
El coqueteo, toda una ciencia
Trabaja tu atractivo
Existen esencialmente dos tipos de atractivo: el estático (que viene marcado por preferencias biológicas, iguales para todo el mundo), puede ayudar en el flirteo, pero no podemos hacer nada por modificarlo si no queremos pasar por el quirófano.
Pero el atractivo dinámico, que es si cabe más importante, viene determinado por una serie de aspectos que todos podemos trabajar.
Lo que hace graciosa a una persona no es su atractivo físico, sino su forma de hablar y sus gestos.
Todos nos hemos sentido atraídos en alguna ocasión por alguien que, sin ser especialmente guapo, tenía “algo” que nos hacía tilín. Ese “algo”, ya sea la forma de andar, de reír o de gesticular, es lo que se conoce como atractivo dinámico y nos sirve para expresar nuestras emociones y mostrar nuestra personalidad al mundo. Es, en definitiva, el carisma de cada persona, como bien define la RAE, la “especial capacidad de algunas personas para atraer o fascinar”.
El lenguaje corporal y hablado es fundamental para construir nuestro carisma: por ello las personas divertidas suelen tener tanto éxito. Y lo que hace graciosa a una persona no es su atractivo físico, es su forma de hablar y sus gestos.
Habla pero, sobre todo, deja hablar
La conversación es muy importante en el proceso de cortejo, por varias razones. En primer lugar, claro está, nos sentiremos más atraídos por las personas con las que podamos mantener una charla interesante pero, además, en el transcurso de un intercambio verbal también se intercambian señales de interés romántico-sexual.
Expresiones del tipo ‘ajá’, ‘sí’, ‘cierto’, ‘estoy de acuerdo’, hacían que las mujeres se sintieran escuchadas y que su interlocutor les pareciera más atractivo.
Un estudio dirigido por Alex ‘Sandy’ Pentland, director del laboratorio de dinámicas humanas del MIT, analizó las conversaciones que mantenían potenciales amantes y descubrió que, lo que mejor predecía el éxito del flirteo, era la cantidad de interjecciones que los hombres realizaban cuando escuchaban a las mujeres. Expresiones del tipo “aha”, “sí”, “cierto”, “estoy de acuerdo”, hacían que las mujeres se sintieran escuchadas y eso hacía que su interlocutor les pareciera más atractivo.
La manera en que una mujer habla también puede ser señal de que está interesada en su interlocutor. Cuando ellas hablan de forma rápida y fluida es que están disfrutando de la conversación, si hablan de forma vacilante y torpe es que, quizás, les estás aburriendo.
Acércate y toca
Si en algo coinciden todos los estudiosos del arte de flirtear es que el contacto físico es el aspecto más importante del proceso. Nadie se siente realmente atraído por la otra persona si no hay tocamientos, pero claro, hay maneras y maneras de tocar. Y cada una debe realizarse a su debido tiempo. Si queremos crear un entorno amistoso (y potencialmente amoroso) con una persona a la que conocemos poco o nada debemos empezar con sencillos gestos como apoyar nuestra mano en su hombro o darle palmadita en la espalda.
A partir de ahí, debemos ir con cuidado. Cualquier otro tocamiento, si no se hace en el momento y el lugar adecuado, puede generar rechazo, pero resulta imprescindible para ligar. Lo primero que podemos hacer es rodear con nuestro brazo la cintura de nuestro objetivo o tocarle el antebrazo. Si vemos que no está incómodo ante estas clarísimas muestras de interés deberemos pasar a lo que realmente funciona: tocar la cara.
Una leve caricia en el rostro de la otra persona es la muestra más clara de que estás interesada. Es el gesto más romántico que podemos realizar: si éste se corresponde con una mirada o algún gesto cariñoso es que has hecho bien el trabajo y puede ir más allá.
Las parejas también necesitan coquetear
Flirtear no solo es para solteros, las parejas también necesitan algo de coqueteo para sobrevivir. Después de estudiar a 164 personas casadas un estudio realizado en la Universidad de Kentucky en 2012 observó que aquellas parejas que mantenían el coqueteo activo también tenían una intimidad más sólida y profunda. Frecuentemente, dice el estudio, las personas casadas flirtean para crear un mundo privado con su pareja.
La gente flirtea por seis razones
Un estudio de 2004 de la Universidad de Nothern, Illinois, identificó las seis motivaciones que tiene la gente para coquetear:
Sexual: Tratan de llevarse a alguien a la cama.
Diversión: Practican el coqueteo como un deporte.
Experimental: Tratan de ver cómo sería tener una relación con el objeto del flirteo (pero sin ir a más).
Relacional: Tratan de aumentar la intimidad en una relación.
Estima: Intentan elevar la autoestima.
Utilitaria: Tratan de obtener algo de otra persona.
Según el estudio, en los hombres es más frecuente la motivación sexual, mientras en las mujeres el coqueteo suele tener más que ver con los deseos de afianzar una relación.
¿De qué hablo?
En el coqueteo algunas conversaciones funcionan mejor que otras, dice la ciencia. Un estudio de la Universidad de Alaska se dedicó a verificar la efectividad de tres tipos de acercamientos con evidentes propósitos de flirteo.
Acoso y derribo: “Tu debes ser espía porque he visto que no me quitas el ojo de encima.”
Inocente. Uno hace preguntas simples como: “¿Qué opinas de este grupo de música?” “¿Cuál es tu equipo, el Madrid o el Barca?”
Directo: “Eres muy guapa” o “¿Puedo invitarte a una copa?”
Según el estudio, los hombres prefieren usar el estilo directo, mientras las mujeres son más de entrar con preguntas inocentes. Muy pocos reconocieron practicar las técnicas de ‘acoso y derribo’ en sus estrategias de coqueteo.
Ellos sobrevaloran, nosotras todo lo contrario
Si alguna vez te habías preguntado por qué es tan difícil que chicos y chicas lleguen a entenderse, quizás la respuesta está aquí. Múltiples estudios apoyan la idea de que hay una falta de entendimiento: los hombres tienden a pensar que las mujeres están más interesadas en ellos de lo que lo están realmente, mientras que las mujeres tienden a creer lo contrario.
Es decir, que los hombres no están tan interesados cuando sí lo están. Este error de percepción de ambas partes se ha comprobado en más de 2000 estudios que fueron analizados por expertos de la Universidad de Texas. La explicación que dan los expertos es que los hombres han sido educados para percibir más señales de sexo en sus entornos que las mujeres. Aunque reconocen que hay que buscar un argumento más convincente.
Las características más atractivas dependen del género
Un estudio de 2011 de la Universidad British Columbia asegura que la felicidad es la expresión facial que resulta más atractiva en las mujeres, sin embargo de los hombres lo que resulta más atractivo es la expresión de orgullo y soberbia.
Ser el más guapo no garantiza el éxito
Una investigación de la Webster University que estudió a la gente que coqueteaba en bares, centros comerciales y otros lugares similares descubrió que las personas que sonreían y establecían contacto visual con otros tenían más posibilidades de ser abordadas que aquellas que eran simplemente guapas o guapos.
Recuerda que sonreír no solo es una señal para que la otra persona se entere de nuestro interés por ella, sino que también es una manera de resultar más atractivo ante la otra persona. El simple hecho de que alguien se interese por nosotros suele hacer que, además, nos llame más la atención en el plano sexual.
El contacto visual marca la diferencia
Sin exagerar demasiado para no asustar al otro, pero fijar la mirada en otra persona tiene sus efectos en el arte de flirtear.
En un estudio se les pidió a 48 parejas de desconocidos de sexo opuesto las siguientes tareas: pasar dos minutos mirándose mutuamente las manos, pasar dos minutos mirándose a los ojos y contra cuántas veces su pareja pestañeaba en dos minutos.
Al final del estudio, aquellos que habían estado dos minutos mirándose a los ojos decían sentir más afecto por la otra persona que el resto de las parejas que habían estado concentrados en otras tareas.
Existen esencialmente dos tipos de atractivo: el estático (que viene marcado por preferencias biológicas, iguales para todo el mundo), puede ayudar en el flirteo, pero no podemos hacer nada por modificarlo si no queremos pasar por el quirófano.
Pero el atractivo dinámico, que es si cabe más importante, viene determinado por una serie de aspectos que todos podemos trabajar.
Lo que hace graciosa a una persona no es su atractivo físico, sino su forma de hablar y sus gestos.
Todos nos hemos sentido atraídos en alguna ocasión por alguien que, sin ser especialmente guapo, tenía “algo” que nos hacía tilín. Ese “algo”, ya sea la forma de andar, de reír o de gesticular, es lo que se conoce como atractivo dinámico y nos sirve para expresar nuestras emociones y mostrar nuestra personalidad al mundo. Es, en definitiva, el carisma de cada persona, como bien define la RAE, la “especial capacidad de algunas personas para atraer o fascinar”.
El lenguaje corporal y hablado es fundamental para construir nuestro carisma: por ello las personas divertidas suelen tener tanto éxito. Y lo que hace graciosa a una persona no es su atractivo físico, es su forma de hablar y sus gestos.
Habla pero, sobre todo, deja hablar
La conversación es muy importante en el proceso de cortejo, por varias razones. En primer lugar, claro está, nos sentiremos más atraídos por las personas con las que podamos mantener una charla interesante pero, además, en el transcurso de un intercambio verbal también se intercambian señales de interés romántico-sexual.
Expresiones del tipo ‘ajá’, ‘sí’, ‘cierto’, ‘estoy de acuerdo’, hacían que las mujeres se sintieran escuchadas y que su interlocutor les pareciera más atractivo.
Un estudio dirigido por Alex ‘Sandy’ Pentland, director del laboratorio de dinámicas humanas del MIT, analizó las conversaciones que mantenían potenciales amantes y descubrió que, lo que mejor predecía el éxito del flirteo, era la cantidad de interjecciones que los hombres realizaban cuando escuchaban a las mujeres. Expresiones del tipo “aha”, “sí”, “cierto”, “estoy de acuerdo”, hacían que las mujeres se sintieran escuchadas y eso hacía que su interlocutor les pareciera más atractivo.
La manera en que una mujer habla también puede ser señal de que está interesada en su interlocutor. Cuando ellas hablan de forma rápida y fluida es que están disfrutando de la conversación, si hablan de forma vacilante y torpe es que, quizás, les estás aburriendo.
Acércate y toca
Si en algo coinciden todos los estudiosos del arte de flirtear es que el contacto físico es el aspecto más importante del proceso. Nadie se siente realmente atraído por la otra persona si no hay tocamientos, pero claro, hay maneras y maneras de tocar. Y cada una debe realizarse a su debido tiempo. Si queremos crear un entorno amistoso (y potencialmente amoroso) con una persona a la que conocemos poco o nada debemos empezar con sencillos gestos como apoyar nuestra mano en su hombro o darle palmadita en la espalda.
A partir de ahí, debemos ir con cuidado. Cualquier otro tocamiento, si no se hace en el momento y el lugar adecuado, puede generar rechazo, pero resulta imprescindible para ligar. Lo primero que podemos hacer es rodear con nuestro brazo la cintura de nuestro objetivo o tocarle el antebrazo. Si vemos que no está incómodo ante estas clarísimas muestras de interés deberemos pasar a lo que realmente funciona: tocar la cara.
Una leve caricia en el rostro de la otra persona es la muestra más clara de que estás interesada. Es el gesto más romántico que podemos realizar: si éste se corresponde con una mirada o algún gesto cariñoso es que has hecho bien el trabajo y puede ir más allá.
Las parejas también necesitan coquetear
Flirtear no solo es para solteros, las parejas también necesitan algo de coqueteo para sobrevivir. Después de estudiar a 164 personas casadas un estudio realizado en la Universidad de Kentucky en 2012 observó que aquellas parejas que mantenían el coqueteo activo también tenían una intimidad más sólida y profunda. Frecuentemente, dice el estudio, las personas casadas flirtean para crear un mundo privado con su pareja.
La gente flirtea por seis razones
Un estudio de 2004 de la Universidad de Nothern, Illinois, identificó las seis motivaciones que tiene la gente para coquetear:
Sexual: Tratan de llevarse a alguien a la cama.
Diversión: Practican el coqueteo como un deporte.
Experimental: Tratan de ver cómo sería tener una relación con el objeto del flirteo (pero sin ir a más).
Relacional: Tratan de aumentar la intimidad en una relación.
Estima: Intentan elevar la autoestima.
Utilitaria: Tratan de obtener algo de otra persona.
Según el estudio, en los hombres es más frecuente la motivación sexual, mientras en las mujeres el coqueteo suele tener más que ver con los deseos de afianzar una relación.
¿De qué hablo?
En el coqueteo algunas conversaciones funcionan mejor que otras, dice la ciencia. Un estudio de la Universidad de Alaska se dedicó a verificar la efectividad de tres tipos de acercamientos con evidentes propósitos de flirteo.
Acoso y derribo: “Tu debes ser espía porque he visto que no me quitas el ojo de encima.”
Inocente. Uno hace preguntas simples como: “¿Qué opinas de este grupo de música?” “¿Cuál es tu equipo, el Madrid o el Barca?”
Directo: “Eres muy guapa” o “¿Puedo invitarte a una copa?”
Según el estudio, los hombres prefieren usar el estilo directo, mientras las mujeres son más de entrar con preguntas inocentes. Muy pocos reconocieron practicar las técnicas de ‘acoso y derribo’ en sus estrategias de coqueteo.
Ellos sobrevaloran, nosotras todo lo contrario
Si alguna vez te habías preguntado por qué es tan difícil que chicos y chicas lleguen a entenderse, quizás la respuesta está aquí. Múltiples estudios apoyan la idea de que hay una falta de entendimiento: los hombres tienden a pensar que las mujeres están más interesadas en ellos de lo que lo están realmente, mientras que las mujeres tienden a creer lo contrario.
Es decir, que los hombres no están tan interesados cuando sí lo están. Este error de percepción de ambas partes se ha comprobado en más de 2000 estudios que fueron analizados por expertos de la Universidad de Texas. La explicación que dan los expertos es que los hombres han sido educados para percibir más señales de sexo en sus entornos que las mujeres. Aunque reconocen que hay que buscar un argumento más convincente.
Las características más atractivas dependen del género
Un estudio de 2011 de la Universidad British Columbia asegura que la felicidad es la expresión facial que resulta más atractiva en las mujeres, sin embargo de los hombres lo que resulta más atractivo es la expresión de orgullo y soberbia.
Ser el más guapo no garantiza el éxito
Una investigación de la Webster University que estudió a la gente que coqueteaba en bares, centros comerciales y otros lugares similares descubrió que las personas que sonreían y establecían contacto visual con otros tenían más posibilidades de ser abordadas que aquellas que eran simplemente guapas o guapos.
Recuerda que sonreír no solo es una señal para que la otra persona se entere de nuestro interés por ella, sino que también es una manera de resultar más atractivo ante la otra persona. El simple hecho de que alguien se interese por nosotros suele hacer que, además, nos llame más la atención en el plano sexual.
El contacto visual marca la diferencia
Sin exagerar demasiado para no asustar al otro, pero fijar la mirada en otra persona tiene sus efectos en el arte de flirtear.
En un estudio se les pidió a 48 parejas de desconocidos de sexo opuesto las siguientes tareas: pasar dos minutos mirándose mutuamente las manos, pasar dos minutos mirándose a los ojos y contra cuántas veces su pareja pestañeaba en dos minutos.
Al final del estudio, aquellos que habían estado dos minutos mirándose a los ojos decían sentir más afecto por la otra persona que el resto de las parejas que habían estado concentrados en otras tareas.
La mujer y sus zonas erógenas
Las zonas erógenas consisten en partes del cuerpo muy inervadas (ricas en receptores sensoriales), las cuales permiten sentir una excitación sexual intensa. En las mujeres, son más sensibles y suelen ser categorizadas en tres grupos diferentes: las zonas erógenas primarias (clítoris y vagina), secundarias (pechos, nalgas, pubis, labios, perineo y ano) y potenciales (regiones que tienen una dimensión erótica como el cuello, orejas, pies, entre otras).
En la mayoría de las mujeres, las zonas erógenas suelen ser bastante parecidas, pero su modo de estimulación (caricias manuales o besos, por ejemplo) varía según las personas. Generalmente, la mejor manera para activarlas es a través del tacto. Asimismo, los besos, los cambios en la respiración y ciertos elementos externos como la utilización de vendas para los ojos son otras maneras para estimular las zonas erógenas. No dudes en probar diferentes estímulos con tu pareja para detectar cuál te conviene más.
Para que las zonas erógenas brinden placer, se recomienda estimularlas durante largos juegos preliminares, ya que las caricias y otros estímulos pueden ser desagradables cuando la persona no está lo suficientemente excitada, debido a que las zonas erógenas son regiones del cuerpo muy sensibles.
¿Sabías que?
Estudio científico sobre estímulos y reactividad
No existen muchos datos científicos sobre las zonas erógenas. Sin embargo, se realizó un interesante estudio científico que ha sido publicado en el 2013 por la revista internacional de neurociencias “Cortex”, el cual se llama “Reports of intimate touch: Erogenous zones and somatosensory cortical organization” y demuestra que las mujeres tienen zonas erógenas muy sensibles. Las partes de su cuerpo más reactivas a los estímulos (caricias, besos, entre otros) son el clítoris, vagina, cuello, pechos, muslos y nuca. Asimismo, esta investigación destaca que muchas mujeres disfrutan de estimulaciones en los oídos y nalgas.
ÁREAS QUE DEBEN SER ESTIMULADAS
pechos
La mayoría de las mujeres disfrutan de las caricias en los pechos. Sin embargo, para que el estímulo sea agradable, debe ser delicado y suave, debido a su extrema sensibilidad. De lo contrario, puede provocar molestias y dolores. Toma en cuenta que el pezón es la parte del seno que más reacciona al tacto.regiÓN GENITAL
La región genital engloba zonas erógenas primarias y secundarias. El clítoris permite llegar rápidamente al orgasmo. Para estimularlo, se sugiere efectuar movimientos circulares y caricias. En cuanto a la vagina, es necesario encontrar el Punto G para sentir excitación sexual. Por otro lado, las caricias en el vello púbico y los labios son muy estimulantes y placenteras. Asimismo, muchas mujeres disfrutan de estímulos en las nalgas y ano.
pies
No dudes en pedir a tu pareja que te masajee los pies con loción corporal durante los juegos preliminares, ya que muchas mujeres sienten placer cuando se los estimula. Asimismo, se pueden realizar presiones y movimientos circulares en los dedos del pie, ya que es una parte del cuerpo muy erótica.
muslos
Los muslos suelen ser una zona erógena potencial, es decir que su intensidad varía según las mujeres. Pide a tu pareja que tome unos minutos durante los juegos preliminares para acariciar la parte interior y exterior de tus muslos. Puede utilizar sus dedos y labios. Para tener una excitación máxima, debe subir progresivamente hacia la región genital sin tocarla.
espalda
Generalmente, las mujeres disfrutan de las caricias y los masajes sobre la espalda. Para tener una estimulación óptima de esta zona erógena, pide a tu pareja que empiece por acariciar la nuca y que baje progresivamente hasta la cima de los glúteos. Se sugiere que los besos y caricias sean lentos y suaves para que la excitación sexual incremente y puedas alcanzar el orgasmo.
manos
Es interesante realizar presiones sobre las palmas de las manos y las muñecas durante los juegos preliminares, ya que es una potencial zona
erógena que puede brindarte mucho placer. Asimismo, introduce tus dedos en la boca de tu pareja para que te los bese lentamente.
En la mayoría de las mujeres, las zonas erógenas suelen ser bastante parecidas, pero su modo de estimulación (caricias manuales o besos, por ejemplo) varía según las personas. Generalmente, la mejor manera para activarlas es a través del tacto. Asimismo, los besos, los cambios en la respiración y ciertos elementos externos como la utilización de vendas para los ojos son otras maneras para estimular las zonas erógenas. No dudes en probar diferentes estímulos con tu pareja para detectar cuál te conviene más.
Para que las zonas erógenas brinden placer, se recomienda estimularlas durante largos juegos preliminares, ya que las caricias y otros estímulos pueden ser desagradables cuando la persona no está lo suficientemente excitada, debido a que las zonas erógenas son regiones del cuerpo muy sensibles.
¿Sabías que?
Estudio científico sobre estímulos y reactividad
No existen muchos datos científicos sobre las zonas erógenas. Sin embargo, se realizó un interesante estudio científico que ha sido publicado en el 2013 por la revista internacional de neurociencias “Cortex”, el cual se llama “Reports of intimate touch: Erogenous zones and somatosensory cortical organization” y demuestra que las mujeres tienen zonas erógenas muy sensibles. Las partes de su cuerpo más reactivas a los estímulos (caricias, besos, entre otros) son el clítoris, vagina, cuello, pechos, muslos y nuca. Asimismo, esta investigación destaca que muchas mujeres disfrutan de estimulaciones en los oídos y nalgas.
ÁREAS QUE DEBEN SER ESTIMULADAS
pechos
La mayoría de las mujeres disfrutan de las caricias en los pechos. Sin embargo, para que el estímulo sea agradable, debe ser delicado y suave, debido a su extrema sensibilidad. De lo contrario, puede provocar molestias y dolores. Toma en cuenta que el pezón es la parte del seno que más reacciona al tacto.regiÓN GENITAL
La región genital engloba zonas erógenas primarias y secundarias. El clítoris permite llegar rápidamente al orgasmo. Para estimularlo, se sugiere efectuar movimientos circulares y caricias. En cuanto a la vagina, es necesario encontrar el Punto G para sentir excitación sexual. Por otro lado, las caricias en el vello púbico y los labios son muy estimulantes y placenteras. Asimismo, muchas mujeres disfrutan de estímulos en las nalgas y ano.
pies
No dudes en pedir a tu pareja que te masajee los pies con loción corporal durante los juegos preliminares, ya que muchas mujeres sienten placer cuando se los estimula. Asimismo, se pueden realizar presiones y movimientos circulares en los dedos del pie, ya que es una parte del cuerpo muy erótica.
muslos
Los muslos suelen ser una zona erógena potencial, es decir que su intensidad varía según las mujeres. Pide a tu pareja que tome unos minutos durante los juegos preliminares para acariciar la parte interior y exterior de tus muslos. Puede utilizar sus dedos y labios. Para tener una excitación máxima, debe subir progresivamente hacia la región genital sin tocarla.
espalda
Generalmente, las mujeres disfrutan de las caricias y los masajes sobre la espalda. Para tener una estimulación óptima de esta zona erógena, pide a tu pareja que empiece por acariciar la nuca y que baje progresivamente hasta la cima de los glúteos. Se sugiere que los besos y caricias sean lentos y suaves para que la excitación sexual incremente y puedas alcanzar el orgasmo.
manos
Es interesante realizar presiones sobre las palmas de las manos y las muñecas durante los juegos preliminares, ya que es una potencial zona
erógena que puede brindarte mucho placer. Asimismo, introduce tus dedos en la boca de tu pareja para que te los bese lentamente.
Conozca los trucos para que él caiga rendido a sus pies
Usted no es fea, no es tonta, no es mala, pero ellos parecen no darse cuenta de que está ahí, en el mundo, a su alrededor, y de que es una gran mujer. Se la pasa a su lado y se siente invisible, parece que su misión en el mundo es pasar desapercibida. ¿Se siente identificada con esta situación? Aprenda algunas tácticas.
Trucos. Cuanto más y mejor interactúes con alguien, más gustará de ti. Es un hecho. A menos que haya una relación inicial negativa. Al principio, no se muestre distante ni evasiva. Al contrario, trate de encontrar excusas para pasar tiempo con él, idee situaciones que los unan. Pero cuando se dé cuenta de que está interesado en usted, es momento de comenzar a estar un poco menos “disponible”. Así va a lograr que piense en ti y en lo mucho que la extraña. No haga cosas por y para ellos, deje que él las haga por ti. No respondas el teléfono o los mensajes de manera inmediata y casi compulsiva, tampoco lo acoses desde Facebook. Para seducirlo mírelo bien fijo.
Trucos. Cuanto más y mejor interactúes con alguien, más gustará de ti. Es un hecho. A menos que haya una relación inicial negativa. Al principio, no se muestre distante ni evasiva. Al contrario, trate de encontrar excusas para pasar tiempo con él, idee situaciones que los unan. Pero cuando se dé cuenta de que está interesado en usted, es momento de comenzar a estar un poco menos “disponible”. Así va a lograr que piense en ti y en lo mucho que la extraña. No haga cosas por y para ellos, deje que él las haga por ti. No respondas el teléfono o los mensajes de manera inmediata y casi compulsiva, tampoco lo acoses desde Facebook. Para seducirlo mírelo bien fijo.
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