Si tuvieras mucho dinero, fueras muy exitoso y el reconocimiento te diera palmaditas en el hombro, pero estuvieras solo, de poco te serviría. La soledad siempre fue el mal de la humanidad, por eso hace 300 años que la gente coloca sus anuncios buscando pareja.
La primera mujer en publicar un aviso fue Helen Morrison el año 1727. Dado que estos anuncios tenían una reputación muy negativa, Helen terminó en una institución siquiátrica por orden del alcalde de Manchester.
Durante la primera guerra mundial, los anuncios en periódicos se hicieron populares. Miles de soldados solitarios y mujeres viudas necesitaban conocer personas, aunque sea por correo.
En 1986 apareció el primer sitio para buscar pareja en internet denominado Matchmaker.com, y fue con el filme Tienes un email que surgieron diferentes portales digitales de contacto con avisos como:“Busco señor con bíceps, que me llene de besos” o “Hombre de buenas costumbres, busca alguien que se las quite”.
Incluso la cantante Cher conoció a su actual pareja por internet. Al principio, el guionista Marvel Ron pensó que era una imitadora, hasta que un amigo le dijo: “¡Es Cher, idiota!”.
Actualmente los smartphones tienen aplicaciones para encontrar pareja o conocer gente en tiempo real. Estos celulares muestran la localización de los solteros que están en la búsqueda para citarse y conocerse personalmente en cuestión de minutos.
“Has montado unicornios, cabalgado ombligos, hurgado cavernas. Has buscado tanto, tanto… y siempre fui yo”, escribí pensando que hay gente que tiene el amor delante suyo y sigue colocando anuncios.
Neruda diría: “No te rindas, por favor no cedas. Porque cada día es un comienzo nuevo, por que esta es la hora y el mejor momento. Porque no estás solo, por- que yo te quiero”
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