miércoles, 21 de enero de 2015

El clásico misionero reivindicamos a la pose conservadora

Un innegable triunfo, la posición del misionero es la elegida por las mujeres. Se notó claramente cuando realizamos un sondeo para saber qué nos agrada más. El 90% de las consultadas afirmó que sí la conoce y admitió que es la que más practica.
Aunque esta postura es catalogada como aburrida, es la más popular, porque según ellas, es la más romántica, pese al cliché de que es muy conservadora.
Ante este hecho, la sexóloga Carolina Rivero Elder, nos explica el por qué de la popularidad de esta pose y sus beneficios.

Por qué la pose del misionero es un clásico
La sexóloga explica que esta postura es la más practicada y conocida desde la época colonial: “La iglesia la aconsejaba para concebir y la catalogó como la mejor”. Ahora sabemos que ese consejo no era del todo cierto.

Rivero comenta que aún así es la más utilizada porque a las mujeres les da tranquilidad saber que todas lo hacen de esta manera y se sienten más normales; y admite que otras la adoptan en realidad por costumbre.

Ventajas y desventajas
Una ventaja muy evidente para la sexóloga es que hay más conexión emocional entre ambos, porque tienen la facilidad de verse a los ojos, amarse y poder erotizarse mirando sus cuerpos.
Según ella, en esta posición ambos pueden llegar al orgasmo y sentirse complacidos.

Sin embargo realizar siempre las mismas posturas torna monótona la relación y se constituye en una desventaja. Esto se aplica para esta y todas las otras poses.

Enfatizó además que en algunas circunstancias esta postura debe evitarse, por ejemplo, si el hombre sufre de eyaculación precoz, pues es recomendable que este no esté arriba. De continuar con ‘el misionero’ no podrá mejorar su cuadro dado que esta posición crea tensión en el hombre y necesitará un mayor esfuerzo para la penetración que propicia la eyaculación precoz.

¿Conservadora y aburrida?
Rivero dijo algo que es muy importante, el aburrimiento no está en la pose, sino en la rutina y en que no se varía el ritual sexual.

Ella explicó que en una relación íntima no solo cuenta la penetración, sino estar un momento en contacto con tu pareja, situación en la que todo influye, desde cómo le hablás hasta cómo la acariciás. Concluyó recomendando que se disfrutará más, si aprendés a seducir. Por lo tanto, lo que se diga del misionero es puro prejuicio

No hay comentarios:

Publicar un comentario