Todas las chicas concordaron: ser tacaño es el defecto masculino más rechazado por las mujeres! La tacañería masculina, sobre todo en Latinoamérica, es una característica aborrecida.
Que quede claro que no queremos que nuestra cita, o pareja, gaste todo lo que pueda en una cena, pero que no deje que el dinero sea la razón por la que no salen a cenar. “Me molesta que miren cada centavo y no vivan su vida tranquilos”, dice Carla.
“Es el peor defecto en un hombre. Además no pueden disfrutar de la vida y te arrastran a ti más”, expresa Lorena.
2. No tiene opiniones
“Tuve un chico que solo me decía “si amor”, “tienes razón mi vida”… ese pobre estaba de acuerdo con todo lo que decía, y me volvía loca, en el mal sentido”, expresa una encuestada. “Nunca proponía a dónde ir, nunca me discutía, pensaba que todo lo que yo decía era correcto… no sé si pensaba igual que yo, si nunca quería pelear, le daba flojera discutir o simplemente era un robot. Lo que si se es que era insoportable”, afirma Lorena.
Una persona con esta característica es incapaz de entablar una conversación-discusión argumentada contigo. Si hay que “llevarlo de la manito” para hacer todo y jamás tiene una opinión interesante, mejor piensa dos veces antes de involucrarte con él, a menos de que te encante el rol de mamá.
“No queremos que pregunten “qué quieres hacer” todo el tiempo. Nos gusta que nos sorprendan”, aclara Carla. “Si él sabe que quiero salir a comer algo rico, que no me pregunte, que me lleve”.
3. Sus malos hábitos
Los malos hábitos son desagradables en hombres y mujeres, pero ellos suelen descuidar más esta característica. No queremos un experto en protocolo pero un hombre que sepa lo básico; hable bien, se siente bien, coma bien y bueno… sea un caballero.
Aunque suene del siglo pasado, los buenos modales en la mesa, el hablar apropiadamente y muchos otros detalles, son esenciales.
“Tenía un chico descuidado y ordinario, y la primera vez que lo lleve a mi casa lo quería botar”, cuenta Mariana. Por otro lado, un hombre que no piense ni le ponga el mínimo interés a verse bien y cuidar su apariencia, son uñas y dientes sucios, mal aliento… difícilmente encontrará una chica y, aunque en muchas ocasiones el look desarreglado es el que más llama la atención y enamora al instante, el desaseo desencanta a cualquiera.
“Uy! Para mí no hay peor cosa que mal aliento. Eso sí me repugna”, reitera Clara, mientras que Alejandra dice que le “encanta que huelan bien… eso si me compra”.
4. Sigue enganchado
Todas y todos tenemos un pasado amoroso y hemos sido protagonistas de una historia de amor, ya sea desastrosa, triste o feliz. Está claro también que una relación larga te marca en cierto sentido, por lo que influye en cómo nos relacionamos con nuestras siguientes parejas.
Sin embargo, cuando un hombre comienza a hablar de su ex de manera recurrente (lo que hacía, decía, etc…) no sólo es incómodo pero es una de las cosas que más nos molesta (y a los hombres también). Aunque todos hacemos comparaciones (lo que es normal) todas queremos ser la panacea en temas de amor y sexualidad. Así que mencionar las comparaciones es totalmente innecesario... mantenlas para ti!
5. El “genio”
No hay nada más fascinante que un hombre elocuente y de mundo, que sabe mucho, es culto, con una charla interesante… Pero cuando surge aquel individuo que cree que lo sabe todo porque ha leído un par de libros y se siente con la autoridad para aleccionarte en todo tema, resulta completamente ridículo y fastidioso. Es el comportamiento que nos hace blanquear los ojos.
“Me desencanta que el hombre sea farsante o se haga al “sabelotodo”… ya sea por sus pertenencias, de él mismo, de su pinta o inteligencia. Hay hombres que ni siquiera te preguntan que te gusta a ti y solo hablan de ellos... eso me mata!”, afirma Lorena.
Y es que hay hombres que no les importa lo que digas, solo lo que ellos quieren decir pues quieren demostrar todo lo que saben y han vivido.
6. No tiene pasiones
Desde coleccionar autitos o historietas a jugar futbol, ajedrez o ser amante del “jogging”… No nos importa! Pero un hombre debe tener un pasatiempo. Una persona (no solo hombre) que no tenga un pasatiempo constructivo, que no haga algo más allá del trabajo y la casa, que no muestre interés por otras opciones, de la infinidad que ofrece la vida, puede ser aburrido. Y es que los temas de conversación se limitan y los intereses en común se reducen.
“Puede que no tenga un pasatiempo o sea fanático de algo, pero debe tener una buena habilidad; ya sea un buen jugador de futbol, un buen cocinero, un buen bailarín, experto para el poker… no sé. Simplemente debe ser bueno en algo y debe sentir pasión por algo. En cierto sentido nos enorgullece esa habilidad que tiene”, dice Lorena.
7. Sus debilidades
Sea por una cuestión evolutiva, o por un convencionalismo cultural, el miedo y la debilidad son características poco sexys en un hombre. Nos gusta una pareja con el que se pueda contar en toda situación. Queremos alguien que nos proteja y con quién nos sentimos seguras. “Mi pareja debe proyectar seguridad. Quiero sentirme cuidada y que pase lo que pase, él me protegerá”, expresa Mariana.
“Por alguna razón, queremos a un hombre que nos proteja, física y personalmente. No importa cuan “independientes” seamos hoy, queremos eso”, reitera. /
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