El amor es capaz de lograrlo todo, diría una pareja de tailandeses que con un beso de 58 horas 35 minutos y 58 segundos vapuleó el récord mundial del ósculo más prolongado, se divulgó hoy en esta capital.
Los esposos Ekkachai, de 44 años, y Laksana Tiranarat, de 33, derrotaron a los vencedores del año pasado y titulares del récord anterior (50 horas 25 minutos y un segundo).
El matrimonio recibió un premio de 2.500 euros y dos anillos con diamantes en este peculiar concurso del día de San Valentín en el balneario Pattaya, al sur de Bangkok.
Las parejas de enamorados que participaron en la competencia desde el martes pasado, no tenían derecho a sentarse y debían besarse sin parar, incluso cuando absorbían un poco de agua con una pajita o al ir juntos al baño.
PL
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