Eyaculación precoz, una disfunción sexual

Mario de 34 años, cuenta que desde los 12 años comenzó a masturbarse, algo muy normal en los púberes y adolescentes y cuando tiene su primer encuentro sexual con una mujer, a los 18 años, empezaron los problemas típicos de eyaculación, descubriendo que no puede controlar sus sensaciones placenteras, lo que le provoca malestar, tanto a él como a su pareja.


Al no poder controlar su orgasmo y no lograr satisfacer sexualmente a su pareja, decide buscar ayuda profesional con una psicoterapeuta y se somete a una serie de ejercicios, logrando superar el problema con el trascurrir del tiempo.


Otro caso es el de Juan, de 29 años, que dice haber tenido un gran número de mujeres, pero que se sentía fracasado porque al penetrarlas, devenía el orgasmo involuntario, situación que se volvió intolerable, porque se sentía culpable por no poder satisfacer a sus ocasionales parejas. Como consecuencia muchas veces fue abandonado por las mujeres con las que compartía su vida sexual.


Un amigo le dijo que su problema era eyaculación precoz y que buscara ayuda para superar su dilema. En las terapias sexuales, se le recomendó la asistencia en pareja para seguir una serie de técnicas con el fin de superar poco a poco la eyaculación involuntaria, situación que fue alcanzada, indica la psicóloga y terapeuta sexual, Liliana Zabala.

¿Qué es la eyaculación precoz?
Es la incapacidad o falta de control por parte del hombre para posponer su orgasmo, independientemente del tiempo en que tarde en eyacular.
El problema, añade Liliana, se presenta cuando el hombre llega al orgasmo con excesiva rapidez durante la interacción sexual, bien por eyacular tras el juego inicial o antes incluso de llegar a la penetración.


Mónica Rivero, psicóloga y máster en Educación Sexual, dice que se considera a un hombre eyaculador precoz cuando durante la introducción intravaginal no puede controlar su orgasmo por un periodo suficiente de tiempo para satisfacer a su cónyuge. “Hasta el día de hoy no se sabe exactamente qué puede determinar si un hombre será eyaculador precoz o no”, expresa.

Incidencia
Liliana señala que la eyaculación precoz no es una enfermedad, es un trastorno más frecuente de lo que muchos creen y alcanza a uno de cada tres hombres, pero lo más grave, es que no es reconocido por la mayoría de ellos.
El médico sexólogo Erland Roca Chaar indica que cerca de un 50% de los hombres sufre de este tipo de disfunción sexual y que generalmente se manifiesta hasta los 35 años de edad.
Cuando es joven, indica, el hombre puede tener cinco, seis o hasta 10 eyaculaciones, pero eso es precoz. “Cabe hacer notar que este problema no se mide por el tiempo que dure la relación sexual, sino que cuando termina antes que su pareja, se pierde el encanto y ahí es cuando se presentan los conflictos en las relaciones de pareja”, argumenta.

Se asocia con la masturbación
Para Liliana la eyaculación precoz está asociada, entre otras cosas, a una excesiva masturbación, pues el reflejo se condiciona a este tipo de estimulación, es decir que el hombre lo condiciona al estimularse solo”, manifiesta.


No obstante, agrega, la masturbación también puede coadyuvar a solucionar la eyaculación precoz en algunos casos que lo requiera, pues el varón aprende a explorar su pene y a descubrir qué parte es la más sensible.


Lo grave es que, en la mayoría de los casos la mujer, como complemento del varón, se resiste a asistir a las terapias de parejas, que lo único que buscan es brindar una posible solución a este problema, porque indirectamente la involucra a ella, dado que la insatisfacción sexual genera conflictos a ambos, pues la gran preocupación del varón es satisfacer plenamente a su pareja.
La sexualidad es una fuente de placer y bienestar que permite disfrutar de una forma privilegiada de comunicar ciertas sensaciones. Estudios afirman que una pareja que no está satisfecha en su vida sexual, es más propensa al conflicto, en comparación con las que tienen una vida sexual satisfactoria, puesto que éstas últimas tienen mejor relacionamiento.

Causas
Mónica señala que entre las causas más conocidas de la eyaculación precoz están las primeras aventuras sexuales que tuvo el varón que generalmente tienden a realizarse con prostitutas, en las que la prontitud del hombre para comenzar el coito y cuanto más rápido pudiese eyacular es mejor para ésta.
“Entonces vemos que el hombre, generalmente inexperto, se condiciona a esta pauta de funcionamiento sexual, pudiendo establecer una respuesta permanente de eyaculación rápida”, explica la especialista.
Generalmente, prosigue, las primeras experiencias sexuales se dan en lugares como automóviles, moteles y hoteles, y lugares donde se está con el tiempo limitado y por ello, los varones tienden a precipitar el acto sexual, de ahí el condicionamiento a lo rápido.
Otra causa, detalla Mónica, es el acariciarse con profusión y luego la pareja realiza la pantomima del coito sin ningún intento de penetración vaginal hasta que el hombre es estimulado a eyacular por la fricción que provoca este proceso de seudocoito. “Los jóvenes que disfrutan en forma repetida de este tipo de juego sexual están expuestos a una pauta de eyaculación precoz, porque se da valor preeminente a la rápida relajación de la tensión sexual masculina”, señala.
La eyaculación precoz también puede deberse a la tensión emocional, por ejemplo, de un primer encuentro sexual. Muchas veces por planear todo a la perfección y demostrar un buen desempeño sexual, es tanto el nerviosismo y la ansiedad que provoca, sin quererlo, una eyaculación precoz.

Causas orgánicas
Para saber si la causa es a nivel orgánico, es necesario realizar previamente un estudio completo para descartar algunas posibles enfermedades que pueden estar afectando su desempeño sexual, como problemas urinarios, de próstata u otros. No obstante, Mónica Rivero, asegura que son muy pocos los casos en que la eyaculación precoz se deba a alguna consecuencia por enfermedad no manifiesta.

Tratamiento
Erland Roca Chaar afirma que la eyaculación debe ser tratada con tratamientos alopáticos con medicamentos. Indica que no es solamente con la psicología, dado que si bien la mente es poderosa, pero hay que saber utilizarla.
“Lo psicológico comienza cuando falla lo fisiológico, puesto que es una reacción química. Es decir, se presenta cuando sucede una vez, por ejemplo, si el varón tiene un orgasmo antes de la penetración o antes que su pareja, queda el temor que la próxima vez va a suceder”, explica el especialista.
Liliana dice que lo más adecuado es que a la hora del sexo, inicialmente se utilice un preservativo (condón), esto con el fin de reducir sensibilidad en el pene y esto lleva a que puede sostener un poco su excitacion sexual y posponer un orgasmo involuntario, esperando que la mujer llegue al orgasmo primero, para ello se puede realizar juegos sexuales amorosos para elevar el deseo sexual en ella, pues al varón no le será dificultoso que su compañera no se decepcione de él en la cama.
Explica que medidas populares como la de distraerse durante la relación sexual o pensar en cosas desagradables para afrontar la eyaculación precoz, no sólo no son eficaces, sino que además pueden deteriorar de forma importante la calidad de la relación sexual.
En el tratamiento, coinciden los psicólogos, deben formar parte las parejas de los eyaculadores precoces. Muchos de los que sufren de este problema no se animan a ir a un especialista por temor al diagnóstico que le pueden dar creyendo que ellos pueden solucionar su problema. En la actualidad existen tratamientos para la eyaculación precoz, los cuales se hacen en pareja para su mayor eficacia y rapidez.

Apoyo de la pareja
Cuando el problema no es tratado a tiempo, las parejas generalmente terminan en la separación, puesto que existe una relación sexual insatisfactoria.
Mónica remarca que la pareja del eyaculador precoz en un primer momento confía en que la ausencia de control eyaculatorio será resuelta con la comprensión y cooperación de ella, como también con la continuidad de la exposición sexual.
Sin embargo, con el paso del tiempo y la frecuencia de la rápida eyaculación del marido que no sólo continúa, sino que cada vez empeora, se manifiesta la frustración sexual de la esposa. “En muchos casos dejan de tener relaciones sexuales y luego de un tiempo, llegan a la separación”, resalta.

Efectos negativos
Erland Roca manifiesta que evidentemente, si no hay un tratamiento a tiempo para la eyaculación precoz, los matrimonios terminan por separarse, puesto que más del 70% de la unión de la pareja es sexo. “Existen casos de mujeres que abandonan todo: esposo, hijos y bienes por un buen sexo”, remarca el sexólogo.
Asimismo, Liliana agrega que los efectos negativos más directamente implicados en la eyaculación precoz, además de la reducción en el tiempo del disfrute sexual para la persona que lo presenta, se centran sobre todo en que impide la realización del coito o reduce su duración, de forma que dificulta la satisfacción sexual de la mujer.
Esto desencadena en ella una molestia constante, enojo, ira, depresión, decepción y por supuesto la separación de la pareja. Es por ello que algunas mujeres se ven obligadas a buscar en otro hombre el complemento faltante, que es el goce sexual o de lo contrario la masturbación, como única salida a la insatisfacción sexual en pareja.

¿Es un problema permanente?

La eyaculación precoz puede ser un trastorno permanente o aparecer de forma esporádica, siendo lo segundo lo más frecuente. Para que se considere como una disfunción, debe ser constante en las diferentes interacciones sexuales, explica la psicoterapeuta Liliana Zabala.

Tratamiento

Los especialistas manifiestan que la eyaculación precoz debe tratarse en pareja para buscar un mejor control sobre el orgasmo masculino. El apoyo de la pareja en la terapia es sumamente importante, dado que se convierte en un instrumento esencial para garantizar el éxito del tratamiento.

Asimismo, con esto se logra enriquecer la confianza y la intimidad, porque sin el apoyo emocional y la comprensión de la esposa, son pocas las posibilidades de conseguir el nivel de relajación para lograr una relación sexual satisfactoria.

Una vez que se ha aprendido un reflejo eyaculatorio rápido, dado que éste es automático, es difícil conseguir controlarlo de forma voluntaria, por lo que cuando ya se ha establecido el problema no es fácil que se cure de forma espontánea