Aunque una de las características de la adolescencia es que los jóvenes rechazan el mundo de los adultos, es indispensable que estos busquen ídolos a quienes admirar e imitar. Se trata de una etapa más a la hora de formar su identidad. Sin embargo, es importante saber diferenciar entre imitar a un ídolo, obsesionarse por él y el aporte positivo o negativo que le puede traer para su formación futura.
modelos a seguir. A veces los adolescentes admiran a personas a las que ni siquiera conocen, a ese artista favorito, jugador famoso, modelo e incluso en sus propios padres, hermanos y amigos señala la psicóloga, Susana Otero. Tener un ídolo es algo normal, sobre todo, en la etapa de la adolescencia. A estas edades comienzan a tomar conciencia de la identidad propia y desean tener guías, referentes a quién poder seguir e imitar.
EL APORTE DE IMITAR. En principio, estos íconos de los adolescentes no pueden catalogarse como buenos o malos, dice la explicación, más que la figura en sí, lo que determina que sean positivos o negativos será la actitud del joven hacia ellos, una excesiva veneración será negativa. Con medida pueden ser una buena herramienta para ayudar a la persona a desarrollarse como tal. Algunos adolescentes ven en sus ídolos, las cualidades que les gustarían tener y no poseen. Otros, buscan en ellos un modo de autoafirmarse, es decir, ver reflejado en sus personajes preferidos, su propia personalidad, para ver aumentada con ello su autoestima.
Las acciones. No se trata de amordazar, sino de supervisar y enseñar buenos valores, señala Otero, ya que existen pautas a seguir: Antes de exigir, recuerda que como padre o madre, tú debes dar un modelo social positivo a tu hijo.
Si el ídolo de tus hijos es sorprendido en un acto inapropiado debes poner en perspectiva que eso no tiene por qué pasarle a él. Además, más allá de endiosarlos, “recuérdale que ese artista famoso no es perfecto”. Ser mamá no es ocultar que puedes cantar, bromear y ser feliz con cosas simples. Aunque no lo creamos, para nuestros hijos pequeños, somos la más bonita que cualquier princesa de los cuentos. .
Muchos adolescentes sin ser excesivamente
Conscientes de ello también imitan a sus padres, hermanos e incluso amigos.
Se debe enseñar a los niños a ser críticos y realistas
De este modo verán a quién imitan como a alguien de carne y hueso.
1-2 Ídolos pueden tener los adolescentes a quienes buscan parecerse.
15 MINUTOS de atención a su hijo son más que suficiente para ayudarlos.
2 padres tanto como mamá y papá deben preocuparse por sus hijos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario