Hay muchas responsabilidades cuando se tiene un bebé, una de ellas es asegurarse de que tenga todos los chequeos médicos que necesita. Estos exámenes de rutina son importantes para saber si el bebé está creciendo y desarrollándose normalmente. También, de haber problemas, encontrarlos pronto, lo que significa que hay mejores posibilidades de tratamiento, manifestó Alfredo Arroyo, neonatólogo de planta en el área de cuidados intensivos de la Maternidad Percy Boland, y especialista en diagnóstico por imagen pediátrico.
CRONOGRAMA. Cuando un niño nace con un estado de salud normal, el bebé y la mamá permanecen en observación dos días, tiempo en el cual ambos se adaptan supervisados por la enfermera y el pediatra, y luego son dados de alta. Después de esto, el primer control médico se debe realizar a los 7 días de nacido, el segundo dependerá de las enfermedades que se detecten o no en el niño, si está todo normal, su segundo control será a los 15 días de vida, el tercer control al mes, y los sucesivos controles son mensuales hasta cumplir los 5 o 6 meses, y dependerá del pediatra de alargar o no los controles, explicó Arroyo.
ENFERMEDADES COMUNES. Entre las enfermedades más comunes de los bebés están la ictericia (cuando se ponen amarillos), que es una de las más riesgosas y debe ser tratada a tiempo. Se le suma la dermatitis del pañal, el problema del ombligo, cuando ha bajado de peso, cólicos, algunas alteraciones benignas en la piel, de ahí la importancia de los controles. Por otra parte, Arroyo aconsejó no dejarse llevar por las apariencias en el caso de que "si la mamá ve bien en la casa a su niño, juzga o toma la decisión de postergar el control", dijo.
COSTO CERO. El factor económico no es ninguna barrera para no realizar estos controles, debido a que todos los niños y madres cuentan con el Seguro Universal Materno Infantil (Sumi). Solo deben acercarse al centro de salud más cercano de su zona.
LO QUE QUEDA PENDIENTE PARA LAS AUTORIDADES
Si bien las autoridades han aplicado políticas de prevención e incentivo como el "Sumi" y el bono Juana Azurduy, todavía queda pendiente el implementar servicios de salud que traten a los neonatos. "Sabemos que existe un hacinamiento y se escucha de un colapso, significa que muchos niños no van a ser atendidos como corresponde", expresó Arroyo.
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