martes, 6 de septiembre de 2011

'Papá no me acompañes'

Muchos padres no logran entender por qué su hijo preadolescente o adolescente se incomoda cuando se ofrece a llevarlo y traerlo de alguna fiesta o encuentro con sus amigos. Pero esta rutina que pareciera ser tan simple, para los chicos cobra una gran importancia y por ende es ideal que los progenitores le presten atención, ya que la forma en que se la ejerza será de gran ayuda para la formación a futuro del joven.


"Llevar y traer a los hijos, es necesario tomando en cuenta que esta etapa es el paso de la infancia en el cual los chicos están empezando a salir del nido y en este trance es necesario que el padre le guíe", dice la explicación del psicólogo, Yohonny Ledezma.

DOS RAZONES. El experto enumera dos motivos por los cuales los padres deben cumplir con este rol, "El primero es porque se está yendo de una familia a un sistema social de diferentes formas de vida y uno no sabe cómo va a reaccionar este chico". Ledezma pone como segunda razón el peligro delincuencial, "Ante ello los preadolescentes y adolescentes se convierten en presa fácil y es ahí que el padre es su mejor guía".

IR SOLTANDO DE A POCO. Ahora bien el hecho de que el joven esté iniciando una nueva etapa, no significa que el padre o madre tiene que ser su chofer siempre "La responsabilidad parte de la familia, si a un chico se le ha inculcado esto sin duda alguna actuará como tal", manifiesta el especialista "Por lo tanto es aconsejable ir a dejarlo y recoger las primeras veces, se puede decir en la preadolescencia entre los 12 y 13 años, ya en la adolescencia se le puede ir soltando y marcando esa responsabilidad que se ha enseñado. Se le puede marcar un horario de llegada por ejemplo", agrega.

LA FORMA DE DESPEDIRSE. Muchos chicos aseguran que sus amistades se burlan cuando sus padres lo llevan y los traen, esto es típico de la edad, dice el experto "Lo que pasa es que muchos padres son muy mimosos y cuando llevan a sus hijos se despiden con muchos besos y abrazos, esa es la situación que les incómoda a ellos, el cómo te despides o cómo lo recibes. Hay que tomar en cuenta que el adolescente en esta etapa busca ser maduro y esos besos y abrazos para ellos en este proceso de cambio es para niños".

LA CLAVE. Ante las molestias de los chicos la posición clave de los padres está en ponerse en el lugar de ellos, que es lo que le gustaría y que no, pero tampoco está en dejarse mandar ya que; por ejemplo, si el joven le pide que lo deje a media cuadra no es aconsejable hacerlo "Se debe llegar al lugar, despedirse de una forma madura y esperar que ingrese si es que no hay nadie afuera. Evite entrar al lugar y dejarlo en manos del responsable", concluye el psicólogo.

ES IMPORTANTE

Que los padres hablen con sus hijos sobre los peligros que lo rodean.

LOS PADRES DEBEN

En momentos ser amigos de los hijos, pero sin dejar de ser padres.

12-13 AÑOS se debe ir a dejarlos y luego se les va soltando de a poco.

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