Hemos hablado que la formación del adolescente depende siempre de la estimulación que debemos a este complejo mecanismo social, físico y emocional, sin embargo, es necesario aprender a respetar y convivir con los cambios sexuales. La identidad sexual y de género son elementos estructurales de la personalidad.
Explicamos en el anterior acápite sobre el desarrollo y cambios de actitudes frente a la familia, hoy compartiremos las manifestaciones de la sexualidad.
IDENTIDAD
La identidad de género nos ayuda al reconocimiento y aceptación de uno mismo, ya sea como hombre o como mujer. La identidad de las personas interactúa en los distintos ámbitos sociales en lo que puede fortalecer o debilitar los valores y la autoestima de los mismos. La identidad tiene roles naturales y roles aprendidos a los que llamamos "roles sexuales y roles de género".
La exclusividad de los roles sexuales de cada sexo como los femeninos son producir óvulos, menstruar, gestar, parir y amamantar. Los masculinos son producir espermatozoides y fecundar.
Cuando hablamos de los roles de género hablamos de los comportamientos de hombres y mujeres.
En la historia ha existido por largo tiempo una división muy rígida entre funciones y el trabajo que deben desempeñar mujeres y hombres, existiendo la sub valoración de los trabajos de las mujeres que en algunos casos continúan persistiendo hasta hoy.
A las personas les dificulta conocer a través de una orientación sexual por vergüenza o por temor, sin embargo, es bueno conocer nuestras preferencias sexuales que los mismos están basados en los sentimientos, atracción sexual y emocional, hacia hombres o mujeres, como hacia ambos sexos.
Las expresiones de la sexualidad pueden darse en diferentes formas: La heterosexualidad, la bisexual y la homosexual, la decisión es absolutamente individual, la cual merece respeto de todas las personas.
La heterosexualidad se refiere a la relación sexual entre hombre y mujer, nuestras sociedades asociaban al ejercicio de la sexualidad único y exclusivamente con la reproducción la cual era reconocida como la única orientación normal.
La homosexualidad y la bisexualidad, eran consideradas una enfermedad o una desviación sin ser aceptadas a estas personas, la historia nos demuestra que algunas culturas y civilizaciones han hecho a estas opciones sexuales, una práctica común.
La bisexualidad nos referimos a dos personas que tienen sus relaciones sexuales entre hombres y mujeres e indistintamente.
La homosexualidad es la relación sexual que tienen entre hombres y si fuera entre mujeres, se la denomina lesbianismo.
La homosexualidad no es una enfermedad tampoco se contagia, simplemente es una opción o preferencia sexual.
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La atracción sexual por alguien del mismo sexo es frecuente en la adolescencia es parte de la búsqueda de la identidad y no significa necesariamente que su preferencia sea homosexual.
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