¿El pasado, pisado?

Cuando el pasado tiñe el presente, lo que más queremos es olvidar los momentos desagradables que no dejan vivir. Es inevitable pasar a lo largo de la vida por situaciones dolorosas que pueden llegar a ser traumáticas, como un accidente, un atentado o la muerte de un allegado. Pero ¿será bueno eliminar los malos recuerdos de la mente? El psiquiatra Nils Noya explica que la memoria siempre recordará-ello no excluye los malos momentos-y niega la existencia de métodos que eliminen los recuerdos. "Pero la solución no es borrarlos, más aún, la persona debe convertir ese dolor en una herramienta de aprendizaje, que sirva para afrontar el futuro y situaciones similares. "Eso se llama superar", dice el profesional.

Renovación del presente. Aunque suene contradictorio, recordar ayuda a seguir en la vida sin el dolor, siempre y cuando sean analizados, dice. "Para conseguir ello se tiene que realizar una renovación del presente", indica. Y descarta de sobremanera la práctica de los procesos de regresión o hipnosis "Eso no tiene nada de cierto”, asegura el especialista.

Indica que el problema se debe enfrentar con una terapia y ayuda farmacológica para reducir el sufrimiento y el dolor. Ello consiste en que el individuo pueda superar con un proceso bioquímico cerebral en base de los neurotransmisores. "El dolor no desaparece, pero cuando la persona los recuerda, se hace menos doloroso". "Estos medicamentos ayudan a regular la estabilidad emocional", señala el especialista.

Siempre vuelven. Si bien la memoria siempre recuerda los problemas, existe una situación en la que las personas pueden olvidar y es cuando el cerebro se bloquea. Noya resalta, que esta situación no evita sufrir el trauma. "Estos recuerdos se tienen que volver a recuperar con una terapia consciente -que se logra con el sicoanálisis-cuando ello sucede el problema se recuerda y se supera”, señala.

Raschid Guardia señala que todas las experiencias son elementos de crecimiento de las personas, que hace ver nuevos horizontes, nuevas oportunidades y además adquirir nuevas conductas. El profesional señala que los recuerdos se pueden olvidar de manera gradual o sistemática. No obstante, destaca que mejor es aprender de los recuerdos y superarlos, "eso se logra trayendo los recuerdos al presente y no olvidándolos", concluye Raschid.