Te ve maravillosa. Un hombre menor se siente atraído por la confianza, éxito e independencia de una mujer mayor que él, mientras que un hombre mayor que la mujer se puede sentir amenazado por la independencia y éxito que tiene.
Asimismo, muchos hombres mayores te juzgan por cosas que hiciste o no hiciste en el pasado. Un hombre más joven no te juzgará por esas cosas. Él encuentra tu experiencia y mentalidad sexy y tú sientes la libertad de contarle todo, pues sabes que no te juzgará. “Lo que a un hombre mayor le parece “fuera de lugar”, un hombre más joven lo ve como una experiencia enriquecedora. Su interés en mis historias y la manera en la que valora mi perspectiva son cosas que alimentan la relación”, dice Sofía, cinco años mayor que su pareja.
Una decisión. Salir con alguien más joven hace que los otros hombres se pongan muy (muy) nerviosos (pues creen que ya no son deseables o que ya pasaron sus “15 minutos”). A los hombres no les gusta la idea que las mujeres están pensando en hombres menores, ya que significa que todo lo que ellos esperan que nos atraiga de ellos (su salario, su Porsche) en realidad no es importante. Hoy nos fijamos en otras cosas, pues las mujeres hoy son exitosas y no necesitan que una persona mayor le de esa seguridad económica.
“Antes la mujer buscaba la seguridad económica, a un hombre con carrera consolidada, mayor. Pero ahora la mujer trabaja y gana igual o más que el hombre, entonces busca más un apoyo, un compañero”, opina Natalia, mayor que su esposo.
Son más divertidos. Es interesante pensar en el aburrimiento como pérdida de amor y en la diversión como condimento para el enamoramiento. Frases como “con él me divierto mucho”, “nos reímos todo el tiempo”, “con él me siento más liviana” parecen dar cuenta de que en esta situación la juventud viene con cierta frescura mientras que los hombres mayores representan aburrimiento y “mañas”.
“Con él haces cosas que tal vez nunca harías (otras actividades divertidas y deportes). Eso te rejuvenece”, cuenta Giselle, casada con un hombre más joven.
“También te obligan a esforzarte por verte más joven y siempre lucir bien”, explica Giselle, y Natalia está de acuerdo: “Te quieres mantener más joven, por lo que estás en forma y te sientes bien con tu cuerpo y contigo misma”.
No tiene miedo al compromiso. Natalia estuvo con un hombre siete años mayor que ella durante ocho años; nunca llegaron a nada porque él tenía miedo al compromiso. La relación terminó y al poco tiempo salió con un hombre cuatro años menor que ella. Un año más tarde, se casaron. “Creo que los viejos son más caretas, más posadores. Me gustó lo decidido que fue y es mi esposo. Con mi experiencia, creo que los hombres mayores analizan más las cosas y piensan demasiado; quizá es otra generación que le daba más terror el matrimonio”, opina.
“Los hombres adultos vienen con un montón de experiencias, con mochilas que les pesan, tienen más fobias, muchos no quieren compromisos. En cambio, los hombres jóvenes no tienen esta carga emocional y hay una mayor libertad para relacionarse. Cuando están juntos disfrutan y cuando no están juntos ella tiene su vida; pues por lo general una mujer mayor ya tiene construida la seguridad en sí misma, por lo que es la relación ideal para ella”, nos dice otra entrevistada.
“Creo que hoy los hombres más jóvenes tienen otra actitud hacia la vida porque han crecido en una sociedad que ha evolucionado mucho en los últimos años. Los hombres cada vez son menos machistas, más sensibles y más abiertos a los cambios en la sociedad, por lo que no se sentirá amenazado por ti, tu trabajo o éxito. Ellos han crecido en un mundo moderno”, opina Sofía.
Más allá del placer. Y finalmente, está el sexo. ¿Juventud o experiencia? Las técnicas necesarias para complacer a una mujer pueden ser enseñadas, y más importante, aprendidas y dominadas (y mejoradas) rápidamente si tienes una pareja curiosa e interesada—y un hombre más joven es la definición perfecta de interés, curiosidad y ganas. “Es más orientado al sexo, por lo que tú te vuelves una persona más sexual para estar al tanto”, asegura Natalia.
“En el aspecto sexual, los hombres menores tienen menos tabúes, se dejan llevar más y hacen todo por complacerte… Por ello, tú también lo haces”, expresa Sofía.
Asimismo, fisiológicamente sus etapas de plenitud sexual coinciden. Las mujeres suelen alcanzarla cerca de los 35 años, cuando se conocen más a sí mismas y a su cuerpo y saben qué cosas le gustan y excita; mientras que los hombres la alcanzan un poco antes, entre los veintipico y los treinta.
“Mientras las mujeres maduran, pueden disfrutar el completo alcance de su expresión sexual. Mientras tanto, el hombre más joven sigue en el estado de sexualidad vigorosa y más dispuesto a explorar sus deseos con una pareja abierta y dispuesta. Estos dos factores crean un química poderosa entre los dos”, asegura la experta en relaciones, Susan Winter, co-autora de Older Women, Younger Men.
Todo se reduce a amor. “Es como otra relación más. Incluso pienso que si la diferencia no es mucha me parece mejor porque la mujer, como el hombre es más joven, se siente más compañera, ya que a veces si es al revés, como mujer te vuelves más dependiente y creo que una clave para una relación sana es que sean compañeros y que ninguno sea dependiente al 100%, ni en lo financiero, ni en lo emocional”, opina Natalia.
Por su parte Giselle dice que es una relación saludable porque “espiritualmente las mujeres somos cada vez jóvenes”.
Para Claudia, todo se reduce a la liberación de las ideas absurdas. “La idea de que la mujer debe ser menor que el hombre sigue estas ideas tradicionales que no tienen nada que ver con felicidad, sino con comportamientos de sociedad. Creo que la gente, y sobre todo las mujeres, nos estamos liberando de todo eso”.
Al final, cualquier diferencia de edad deja de importar. “Lo que encontré en él es a alguien que comparte mis intereses y valores, lo que no tiene relación con la edad: la amistad, fidelidad, amor por la familia… son prioridades que compartimos”, asegura Sofía.
“Para que funcione tiene que haber amor, inteligencia, paciencia, desapego y todo lo que se necesita para que toda relación se desarrolle”, afirma Claudia.
Al final, lo que nos gusta o seduce de un hombre es tan particular como lo somos nosotras mismas. Como dicen: cada pareja es un mundo.
Las reglas
Desde famosas como Mariah Carey (10 años mayor que su esposo) y J-Lo, 18 años mayor que su novio, a nuestras entrevistadas, vivimos en la era de las “cougar”.
La pregunta es, ¿cómo haces que esta relación funcione? La experta en relaciones, Susan Winter, co-autora de Older Women, Younger Men, da consejos.
No seas insegura. Por siglos, la mujer ha sido programada para pensar que su auto valoración depende de la belleza y juventud. Ya no seas víctima de ese pensamiento absurdo. “Esos pensamientos limitantes que una mujer absorbió son los que pueden crear problemas en una pareja. Si ella se siente insegura, temerosa y duda de sí misma, nunca será capaz de aceptar que un hombre más joven la ama”, dice Winter. Y añade que la obsesión de Demi Moore por verse más joven es “el ejemplo perfecto de como el ideal de belleza y juventud puede torturar al ejemplo más digno de una mujer moderna”.
Muchas piensan que deben mantener una ilusión de juventud para mantener a su pareja más joven, pero es absurdo. “El hombre más joven sabe que eres mayor. Es algo que acepta, porque el valora la totalidad de quien es su pareja y lo que trae a su vida”, expresa.
Hablen sobre familia. ¿La razón principal por lo que muchas de estas relaciones no funcionan? La planificación familiar. Las discusiones más comunes nacen cuando el hombre más joven quiere un hijo y la mujer mayor que no quiere más hijos, pues ya los tiene, porque ya no puede, o le gusta su estilo de vida “sin hijos”. O cuando él quiere esperar para tener hijos y la mujer no quiere, ni puede. La durabilidad de estas parejas dependerá de los proyectos de vida y si éstos son compatibles.
Se valiente. A pesar de la prevalencia de la tendencia “cougar”, las mujeres mayores no deben esperar que la sociedad vea su relación con un hombre más joven como “normal”. Lo más probable es que reciban algunas miradas de asombro. Así que si sales con un hombre más joven, debes tener una mente abierta y ser una mujer que no le importa el sistema tradicional, ni la convención social. “La clave para que una relación así funcione es tener la mente abierta”, dice Giselle. En general quienes se atreven a mantener este tipo de relaciones son mujeres fuertes.
QUICKIE
Las mujeres no nos vestimos para los hombres, sino para otras mujeres. 35% dice que se viste para impresionar a otras mujeres; 31% se viste para impresionar a los hombres y 34% asegura vestirse para “sus amigos o personas en medios sociales”.
63% de las mujeres reporta fingir un orgasmo en algún punto. 33% dice que nunca lo fingió, 26% dice que muy rara vez; 26% dice que cada vez. Más sorprendente: 34% de los hombres dice que lo fingió alguna vez en su vida.
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