El fin de la lactancia

Salud y Belleza
Lunes, 11 de Julio, 2011
El fin de la lactancia
Adecuado. Es aconsejable destetar al bebé en forma gradual. Le explicamos cómo sobrellevar este proceso.
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Acerca del autor:
Roxana Ibañez
e-mail: ribanez@edadsa.com.bo
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Llega un momento en que todas las madres que están dando de amamantar se preguntan, ¿hasta cuando prolongar la lactancia? En ocasiones, es el bebé quien toma la iniciativa, pero en muchas otras, será la madre la que tendrá que fijar un día para iniciar el final de esta etapa. Quien ha amamantado sabe que dar el pecho es algo más que proporcionar alimento. Es el vínculo afectivo y esa forma especial de relacionarse con el bebé lo que más pesa en la despedida, dice el pediatra Juan Hurtado.


Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es recomendable amamantar al bebé a demanda durante sus primeros 6 meses de vida y, a partir, de ese momento complementar la leche materna con la alimentación complementaria hasta el año de vida. Sin embargo, según las estadísticas, menos del 30 por ciento de las madres consigue dar el pecho más allá del sexto mes.

HÁGALO DE FORMA GRADUAL. Así debería ser siempre el destete, dice el experto, ya que un final brusco, además de provocar molestias físicas, puede suponer sentimientos de tristeza y frustración para la madre, y de abandono e inseguridad para el niño.


En realidad, el destete empieza con la primera papilla. A partir de ahí, la lactancia va disminuyendo hasta desaparecer. Dejado a su evolución natural, el proceso de destete suele durar entre dos años y tres y medio, aunque es muy variable. Si decide acelerarlo, la duración dependerá del ritmo que usted marque.

ES MEJOR ACORTAR. Para que su bebé no sienta de golpe el proceso, acorte la duración de las amamantadas: hágalo gradualmente y de manera casi imperceptible, si estuviera por amamantarlo en diez minutos, comience a acortar el tiempo a nueve, luego a ocho minutos y así sucesivamente.


Cuando su bebé empiece a dejar entrever que está listo para ingerir alimentos semisólidos o sólidos, trate de posponer la hora de amamantar. Dígale suavemente que le dará el pecho más tarde, por la noche, antes de irse a la cama a dormir. Luego, vuelva a distraer su atención. Asegúrese de darle juguetes o suplementos que lo distraigan cuando esté hambriento o enojado.


Procure que cuando inicie el destete sea una etapa tranquila y sin enfermedades, ya que un bebé enfermo se aferrará mucho más al pecho, debido a los anticuerpos que le brinda la leche.

SI NO QUEDA DE OTRA. El destete abrupto, solo es aconsejable para casos en que es inevitable, por ejemplo, cuando una madre con cáncer debe iniciar un tratamiento de quimioterapia sin demora.


Este tipo de destete es difícil porque el bebé lo siente como abandono y el cuerpo de la mamá sigue produciendo leche, para evitar este tipo de situaciones debe extraer solamente un poco de leche, de forma que los pechos no se sientan adoloridos, pero teniendo cuidado de no vaciar la glándula mamaria, ya que esto hará que se produzca más leche.

UN BUEN MÉTODO

Puede optar por ofrecerle pecho solo cuando él o ella se lo pida.