¿Mi hijo es adicto a la Internet?

Internet es una herramienta que con el paso del tiempo se ha convertido en una necesidad de la humanidad, con ella se puede mantener en contacto con el mundo con tan solo dar un clic; sin embargo, el uso que los jóvenes están haciendo de los chats, redes sociales, ha derivado en muchos casos en un abuso que llega a generar dependencia y descontrol. Pero ¿Cómo un padre puede darse cuenta que su hijo adolescente es adicto a la Internet?.


Diversos estudios alertan que un 30% de los adolescentes usuarios de la Internet y videoconsolas desarrollan adicción. Esta patología suele derivarse en cuadros de desmotivación para el estudio y requieren de un diagnóstico precoz para un eficaz tratamiento, señala la psicóloga Isabel Roca.


"No es lo mismo el uso de la Internet que el abuso", añade la experta, ya que hay que tener en cuenta que hoy en día la Internet es el medio por el que uno se comunica más rápido y con más cantidad de gente, y los adolescentes saben cómo sacarle partido a esto así que, "una vez más a los padres les puede resultar complicado saber si sus hijos, maestros expertos de esta herramienta, la están utilizando adecuadamente. Sin embargo, no hay que engañarse, hay algunos aspectos dignos de observación por parte de los padres", agrega.

PARA IDENTIFICAR. Pregúntese si el uso de la Internet de su hijo le afecta en su rendimiento escolar, salud y relaciones con familiares y amigos. Determine cuánto tiempo pasa el joven conectado.


COMPORTAMIENTO. Si están evitando quedar con los amigos en la calle y solo están en el ordenador, es síntoma de que algo no funciona. Hablar con los amigos o comunicarse por chat es muy “normal”, pero solo comunicarse por esta vía o tener amigos virtuales, tiene que ser algo significativo para los padres, alerta la especialista.

NO PROHIBIR. Una vez identificado algunos síntomas de adicción, los padres no deben prohibir el uso de la Internet, en su lugar, se debe establecer reglas para la familia acerca de dónde pueden ir los jóvenes cuando se conectan y lo que pueden hacer y adherirse a ellas. Estas reglas pueden incluir: un período de tiempo limitado de conexión cada día, nada de navegar o mensajes instantáneos hasta que los jóvenes acaben sus tareas escolares o nada de salas de chat ni contenido para adultos en línea".

DAÑOS QUE SE DEBEN TRATAR. Este tipo de dependencia o abuso de la Internet en los jóvenes afecta de manera negativa y daña las relaciones familiares y todo su entorno. Si hay sospechas por parte de los padres o se sienten preocupados porque observan que sus hijos están abusando, sería muy aconsejable que se contactaran con un profesional en ayuda a los adolescentes, quien establecerá la terapia adecuada para evitar que estos hábitos se hagan cada vez más difíciles de tratar.

1 LAS NOTAS. Si los jóvenes siempre están conectados y dicen que están haciendo las tareas escolares y luego los resultados académicos no corresponden a lo que han estado trabajando, es una razón para poner en duda su dedicación.

2 CAMBIOS. Si se observa que el adolescente está cambiando ciertos hábitos, como ir a la cama a horas razonables, es sintomático y requiere desde luego atención por parte de los padres.

3 ACTITUD. Cuando los hijos se irritan con exceso si se les interrumpe, se observan respuestas desproporcionadas con el hecho de dejar de utilizar la Internet, debe ser significativo para los padres.

4 INTERÉS. La vida social es nula, debido a que se pasa muchas horas conectado en la Internet. Nada interesa y se deja a un lado a los amigos, familiares e incluso la televisión, entre otras cosas.

LOS PADRES SON EJEMPLOS


Examine sus propios hábitos de conexión. ¿El uso que hace de la Internet está en equilibrio con otras actividades? Recuerde que usted es el modelo ejemplar más importante para su hijo.