La planificación familiar natural es una alternativa saludable

La ginecóloga María Consuelo Mercado asegura que cada vez más parejas optan por el método natural de planificación familiar. “Llegamos a la realidad de que no hay método más eficiente e inocuo que el de la planificación familiar natural, porque se basa en el ciclo endocrinológico de la mujer, en el que cada organismo tiene su propio funcionamiento”, sostiene la ginecóloga Mercado.

El método Billings establece que partir del primer día de la menstruación hasta el día en que el ovario libera su óvulo, generalmente en la mitad de su ciclo, la mujer puede hacer seguimiento mediante la observación de ciertas mucosidades que salen a través de la vulva y que en el día de la ovulación se transforma en un moco filante, transparente, inodoro, como un elástico, que es fácil detectar. Significa que el óvulo ha sido liberado y si se encuentra con un espermatozoide, con seguridad la mujer quedará embarazada.

Este óvulo vive entre 48 a 72 horas, y posteriormente se absorbe en el organismo de la mujer. Entonces, ¿qué es lo que corresponde hacer? Sencillamente evitar tener relaciones tan solo esos dos o tres días, y el resto del tiempo no hay ningún impedimento. Cada mes la mujer puede seguir el procedimiento, durante el tiempo que desee cuidarse.

“Ventajas hay muchas. Primero, que no importa si el ciclo es corto o largo, y no producirá ninguna alteración en el organismo femenino. Requiere la colaboración del esposo o pareja, cuando ella le diga que está en los días de ovulación y no puede cohabitar por un período tan corto”, aconseja la ginecóloga.

La especialista explica que con la píldora anticonceptiva se altera el ritmo normal del ciclo menstrual, el flujo es más oscuro y escaso; además producen efectos secundarios, como dolores de cabeza, náuseas, malestares gástricos o hepáticos y trastornos vasculares, que a la larga pueden derivar en trombosis o embolias.

También menciona los anticonceptivos inyectables con iguales consecuencias, habiendo uno que impide el embarazo por tres meses, pero que a veces produce suspensiones menstruales de un año o más. Los otros métodos por los que se introducen dispositivos dentro del útero tratan de producir una reacción química que impida el encuentro del óvulo con el espermatozoide, pero tienen el inconveniente de que no hay seguridad de que ello suceda y se pueda la mujer embarazar y abortar en cualquier momento, además de sufrir infecciones.

Con la píldora del ‘día después’, puede ser que la noche en que se realizó la relación sexual la mujer hubiera estado fértil, se haya embarazado y al tomar la píldora, lo que hace es expulsar el embrión recién concebido.

En la parroquia de La Santa Cruz hay especialistas en el tema. Llamar a Ivonne Tambaré de Vargas, instructora de planificación familiar natural, al teléfono 343-0302 y; en Montero, comunicarse con Elena Zini, al 922-1331