Salir del amor ilesas? El título no se refiere al corazón, sino a la integridad física. La ex presidenta de Chile, Michelle Bachellet, directora ejecutiva de la ONU Mujeres, dijo que 603 millones de féminas viven en países donde la violencia de género no se considera un delito. Habló de la niña pakistaní Malala, baleada por pedir educación. Está el caso de una joven de 15 años de las islas Maldivas, condenada a 100 latigazos por ser violada y embarazada por su padrastro. Su caso se conoció cuando el abusador asesinó al recién nacido. Está Aisha, de Afganistán, vendida por su padre a los doce años, su marido abusaba de ella, le cortó la nariz y las orejas y la dejó abandonada en el campo creyéndola muerta. La lista es infinita… y aterradora. En Bolivia tenemos nuestros propios talibanes.
Masacran a sus mujeres en casa y luego se resguardan en esta sociedad machista; en sus instituciones y logias, donde sus camaradas brindan por sus hazañas. Se protegen con la incapacidad de nuestra sociedad para sancionarlos con un montón de leyes que no sirven para nada. Bachelet pide "coraje, acción y determinación”. En Bolivia ya se anunció que los abusadores no podrán ser funcionarios públicos. Si estamos en esta línea, ‘simple’, también deberíamos prohibirles que sean policías.
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