El tema de la edad no es determinante, no es el éxito o el fracaso de la relación, hay que encontrar el equilibrio, para mí no es un problema". Con esas palabras, la periodista Claudia Fernández (24) respondía a la prensa en referencia a la diferencia de edad que le lleva a su novio, el vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, de 50 años. Y es que la diferencia de edad es un tema recurrente en muchas parejas pero, ¿cuánto influye y cuán relevante es la edad? Diferencias de 5, 10, 15 o 20 años no deben ser dejadas de lado como sin fueran asuntos de poca importancia, señalan los expertos consultados por El Sol.
Puntos influyentes. "La diferencia de edad no es un obstáculo cuando la pareja tiene claro lo que siente y qué espera de esa relación", manifiesta la psicóloga Eva Oberlander. No obstante, dependiendo de la edad a la que inician la relación y el número de años de diferencia, la relación puede ser más complicada. A su vez, el psicólogo Luis Roca enfatiza que "en ocasiones estas parejas despiertan dudas y recelos en familiares y amigos y no siempre son aceptadas socialmente; sin embargo, es importante no sentir vergüenza ni esconderse".
Según el sexo. Los especialistas coinciden en que cuando un hombre adulto busca a alguien menor que él le mueve el deseo de sentir que todavía es joven y de seguir viviendo la vida con intensidad. "Estar con una mujer joven le aumenta su autoestima y confianza en sí mismo", detalla Roca. "A su vez, la mujer joven, que se siente atraída por un hombre maduro, suele ser por la experiencia, sabiduría, estatus social o poder que posee", añade.
Oberlander recalca que cuando la mujer es la mayor, es una situación poco aceptada por la sociedad. "En muchos casos estas mujeres buscan una relación con un hombre más joven para poder dirigir con más facilidad su vida, para lograr tener las riendas y control en sus manos, mientras que el varón joven se puede sentir atraído por las mujeres mayores por una búsqueda de protección y seguridad", añade.
Cambios y riesgos. Ahora, cuando se trata de casos extremos, cuando hay una diferencia de más de 20 años, uno de los dos busca llevar al otro a su ámbito. "Si la mujer es menor, trata de rejuvenecerlo o termina 'aseñorándose' o viceversa en el caso de los hombres", dice Roca. A decir del especialista, estas uniones, cuando se actúa como el padre o madre de su pareja, tienden a fracasar. "Cuando los roles dentro de la relación son muy rígidos, es muy difícil que sigan adelante", señala. La más grande amenaza en una relación de este tipo es la infidelidad, dicen los expertos y sobre todo cuando la mujer es mayor que el hombre, pues en el caso contrario la mujer es más sensible y suele dejarse guiar por sus sentimientos, pero todo depende de cómo la pareja enfrente su relación.
1 No haga caso. Es natural que los demás hablen sobre su relación y los motivos que los han unido; sin embargo, no hay que dejarse. Tome en cuenta que las relaciones son solo de dos, por lo que se debe evitar estas influencias externas. Si está seguro de la relación que quiere, debe defenderla y luchar por ella.
2 Hablar. Una de las claves para sobrellevar cualquier relación, y más aún con diferencia de edades, es la buena comunicación. Es importante hablar con la pareja sobre las cosas que les gusta y les disgusta a ambos. Ante todo, hay que estar seguro, conocer las diferencias y los posibles problemas que se pueden enfrentar.
3 Confianza. Los celos son dañinos para cualquier relación, y en estos casos generalmente provienen del miembro mayor de la pareja, que nota en su cuerpo el paso del tiempo y tiene miedo a que el otro busque a alguien más joven, a alguien de su edad. Es importante confiar en la pareja.
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