Intuición femenina

Esa persona te dio un mal tincazo. No quisiste salir anoche porque sentiste que algo malo podría suceder… ¿Qué es el sexto sentido o la intuición? ¿Realmente existe o, son nuestros miedos o deseos los que se manifiestan? Muchas nos preguntamos si realmente está ahí. Aunque científicos y expertos debaten sobre la existencia de un sexto sentido, y aún se cuestionan si es cuestión de feromonas, intuición o instinto, lo único que sabemos es que está ahí.

“Además de la vista, oído, gusto, olfato y tacto, poseemos otro sentido que no es físico: la mente, que nos permite aumentar la sensibilidad, la creatividad, la inspiración, la imaginación, enriquecer la comprensión o interpretar señales. Algunos lo llaman intuición, otros, sexto sentido”, explica la licenciada-psicóloga Sijam Ismael.

Investigaciones revelaron que leer la comunicación no verbal es una habilidad que las mujeres la tenemos más desarrollada.

Estudios han demostrado que, en general, las mujeres somos más empáticas que ellos y abiertas a mensajes emocionales.

Por otro lado, psicólogos evolucionistas creen que es así porque a lo largo de millones de años, las mujeres hemos aprendido a interpretar las emociones de nuestros bebés: la madre se ve obligada a leer los matices emocionales en la expresión no verbal del recién nacido porque es un factor esencial para su supervivencia.

Para Sijam, este nivel se desarrolla mediante la frecuente interacción con las personas. “Se llega a conocer tan bien las reacciones, gestos, muecas, tonos de voz, lenguaje no verbal, rasgos físicos, expresiones emocionales típicas… que cuando nos comunicamos, siempre que estemos interesados, podemos conocer, interpretar y anticipar reacciones y formas de actuar de los demás”, indica

Comprendiendo la intuición

Aunque parece que la intuición nace de alguna misteriosa fuente interna, en realidad es una forma de razonamiento inconsciente—es la manera que nuestros cerebros coleccionan y guardan la información. Sin embargo, la intuición es una facultad de la mente abstracta, que no llega a la conclusión mediante un camino lógico o explicación racional.

“La intuición se presenta de diferentes formas, simplemente sabemos que algo no está bien sin saber por qué, sabemos que a alguien le pasó o pasará algo o que la decisión no es la correcta, aunque todo señale que sí va resultar; nos impulsa a arriesgarnos sin saber por qué (y ganamos); o intuimos que la situación se va a complicar sin saber por qué… escuchamos una vocecita que nos advierte algo…”, dice Sijam.

La intuición también es entendida como un salto mental de inspiración o comprensión súbita de un problema (lo que se conoce en inglés como insight) o captar un conocimiento desde otro punto de vista, encontrar la pieza que faltaba en un rompecabezas.

“Es una comprensión más profunda e interna de lo que aparentemente muestra una situación, objeto o experiencia de vida”, explica.

Aplícala a tu vida

Desde cómo lidiar con un asunto cotidiano a las decisiones más importantes de tu vida, la intuición es útil. Pues en algunas decisiones de la vida, la racionalidad no basta, y la intuición nos permite atravesar el proceso de pensamiento lógico y alcanzar la mejor solución.

“Las decisiones racionales son buenas cuando el problema está perfectamente definido, cuando tenemos toda la información disponible, tiempo para analizar las variables, evaluar y comparar todas las alternativas posibles. Pero no siempre tenemos todas las condiciones para encontrar soluciones en la vida real. Se nos puede presentar un problema mal definido, carecemos de partes esenciales de la información, o no disponemos del tiempo necesario para analizar todas las alternativas. Nos vemos obligados, miles de veces cada día, a tomar decisiones en base a nuestra intuición”, afirma la experta.

Las mujeres, seres intuitivos

Que la intuición existe, está probado. Ahora la cuestión es, ¿estamos las mujeres más conectadas con nuestra intuición?

“El cerebro femenino posee una sensibilidad más elevada, flexibilidad para adaptarse a situaciones nuevas, intuición y una mayor visión integral del mundo. Esto nos permite percibir advertencias como si el corazón nos estuviera contando algo que está por acontecer o está aconteciendo”, explica Sijam.

Además de las razones evolutivas, experimentos de neurobiología han demostrado que las mujeres utilizan los dos hemisferios del cerebro, mientras que los hombres usan sólo uno. Ambos hemisferios, derecho e izquierdo, tienen funciones distintas: el primero es la sede de las emociones, el segundo, del pensamiento racional.

Louann Brizendine, neuropsiquiatra estadounidense, resaltó la diferencia de la realidad hormonal de hombres y mujeres, y expresó la importancia de las hormonas como estimuladoras, en mayor o menor medida, de ciertas áreas del cerebro, determinando intereses e inclinaciones, y también el hecho de que las mujeres utilicen circuitos cerebrales distintos que los de los varones para resolver los mismos problemas, procesar el lenguaje, experimentar y almacenar la misma emoción. Así mismo, se demostró que la química cerebral de la mujer es más cambiante que la masculina y sólo permanece igual a la de los varones durante las primeras ocho semanas de la concepción.

En palabras de Louann Brizendin: Las mujeres tenemos mejor inteligencia emocional que los hombres: nuestro hipocampo es ligeramente más grande y es el que registra los datos emocionales. Una segunda diferencia está en el número de neuronas espejo para la empatía: las mujeres tenemos más y son más activas, de manera que nos permiten ponernos en la piel de la persona. Por ello, nos comunicamos mejor que los hombres.

“Últimamente ha surgido un desarrollo más profundo sobre lo que significa la inteligencia emocional, como utilizamos el cerebro los hombres y las mujeres, lo cual probaría que realmente la intuición o sexto sentido no es un mito”, afirma Sijam.

La conclusión a la que llegaron los estudios sobre la intuición en los diferentes sexos, fue que es posible prevenir un evento antes que éste suceda y que son las mujeres las que estaban mejor conectadas con ese sentimiento intuitivo.

Desarrolla tu sexto sentido

Se puede decir que las personas creativas y emocionales tienen un mayor desarrollo de la intuición. Y es que la creatividad y la intuición se originan principalmente en el hemisferio cerebral derecho. “Este hemisferio concibe la realidad de forma holística, global, abstracta… donde no hay la lógica del tiempo ni espacio, sino un todo sintético e integrado”, explica Sijam.

Sin embargo, no todas las intuiciones son creativas, pero toda creatividad ha pasado por una intuición previa. “Los inventores, descubridores, conquistadores, científicos, innovadores y grandes artistas siguen las señales de sus mentes intuitivas y realizan sus logros “saltando” a un razonamiento paralelo, diferente al razonamiento lógico común”, cuenta.

De esta manera, si desarrollas tu creatividad desarrollarás tu sexto sentido. Para desarrollarlo la especialista sugiere el siguiente ejercicio: Escoge un objeto cualquiera y obsérvalo. Luego menciona todos los usos que puedes hacer de él. Cuando hayas agotado las alternativas, buscando hasta las más absurdas, identifícate con el objeto y pregúntate como si fueras él mismo, “yo he venido al mundo para…”.

La respuesta te dirigirá hacia la idea que generó la existencia del objeto. Este ejercicio permite a la mente desarrollar una capacidad de ir más allá de las interpretaciones comunes y externas de la realidad, buscando su esencia interna, lo que a su vez, desarrollará la intuición, explica Sijam. /





Tu cerebro por etapas

“El cerebro femenino es una “maquina fabulosa de aprendizaje” que gobierna la vida de una mujer desde que nace”, dice Dr. Louann Brizendine, neuropsicóloga y autora de The Female Brain. Pero, ¿qué hace único a nuestro cerebro femenino?

1. Nacimiento: Hasta las ocho semanas todos los cerebros son femeninos. En los niños, una gran ola de testosterona es disparada al cerebro, matando las células en el centro de la comunicación para que crezcan más células en los centros del sexo y la agresión. En las mujeres, grandes cantidades de estrógeno incentivan el crecimiento del cerebro y desarrollan los circuitos y centros de la observación, la comunicación, los presentimientos e intuición, y el cuidado y afecto.

2. Adolescencia. Durante la pubertad, el propósito primario de una adolescente (desde un punto de vista biológico) es convertirse en sexualmente deseable y atractiva. Las chicas hablan dos o tres veces más palabras al día que los chicos.

Conectarse a través de palabras activa los centros de placer en el cerebro de una chica, explica Brizendine.

3. Maternidad. El cerebro se achica durante el embarazo, no pierde células pero cambia su metabolismo y se reestructura. En la última semana del embarazo, el cerebro comienza a crecer nuevamente y construir circuitos maternales. “No sabemos lo que está sucediendo exactamente, pero pensamos que tiene algo que ver con el redesarrollo de los circuitos del cerebro de la mamá”, dice Brizendine.


Manos a la obra

ESCUCHA TU INTUICIÓN

Opinión médica

“Muchas veces los médicos pueden ignorar ciertos síntomas porque los ven como paranoias, especialmente en mujeres jóvenes y saludables”, dice Judith Orloff, psiquiatra y autora de Second Sight. Los médicos ponen mucho énfasis en los exámenes en lugar de prestar un poco más de atención a las señales que manda el cuerpo de un paciente. “Tu cuerpo está hecho para sobrevivir y la intuición es una manera de protegerse”, dice Orloff.

La estrategia: ¿Tienes dificultadas en distinguir entre tu voz interna y tu lado hipocondriaco? Escucha bien lo que estas sintiendo. El miedo tiene una fuerte carga emocional, mientras que la intuición se manifiesta como una información que a menudo se siente impersonal. “Escuchar las señales de tu cuerpo puede ayudarte a prevenir mayores problemas de salud”, aconseja Orloff. Si tu médico no le da importancia a un síntoma y dice que no es nada serio, pero tú sigues convencida que hay algo malo, sigue tu intuición y busca una segunda opinión.

Una gran compra

Un estudio encontró que cuando los compradores deliberan menos antes de comprar un ítem importante (como auto, casa o computadora), están más satisfechos con sus nuevas posesiones. “Las primeras impresiones intuitivas pueden revelar mucho, especialmente cuando se trata de compras estéticas”, dice David G. Myers, autor de Intuition: Its Powers and Perils. “Estos sentimientos, en lugar de razones, son los que pesan”.

La estrategia: Si puedes darte el lujo de comprar el ítem que quieres, no pienses demasiado en los dólares ni los centavos. Escucha tu instinto.

Jugando para ganar

Sin intuición no hay gloria… Ya sea que estés matando en la cancha de tenis o atacando en la cancha de voleibol, la decisión que se siente bien es la correcta. La intuición es básicamente tu cerebro en piloto automático. Un estudio de la Michigan State University encontró que los jugadores de ajedrez tuvieron resultados similares en “blitz chess” (una versión del juego de cinco minutos) que en el juego tradicional.

La estrategia. Resiste las ganas de sobre analizar cada movida. No mejorará tu juego ni tu rendimiento.



ESCUCHA TU CABEZA

Contratando un nuevo empleado
Si un candidato al nuevo puesto es agradable y simpático, naturalmente te inclinarás por él, no por ese candidato serio y más calificado. Es comprensible, pero no lo más inteligente.

“Muchos sobreestimamos nuestra habilidad de intuir la capacidad laboral de una persona”, dice Myers, que explica que las primeras impresiones pueden reflejar inclinaciones personales (por ejemplo, es más probable que contrates a ese candidato simpático que te recuerda a tu mejor amiga).

La estrategia: No ignores la química, ya sea buena o mala, pues tendrás que trabajar con esta persona… pero que este atributo esté al final de tu lista, luego de las referencias laborales y trabajos previos, dice Myers. Pregunta a cada candidato las mismas preguntas para que puedas compararlos mejor.

Inversiones

“Lucha contra las ganas de seguir un presentimiento”, dice Mary Ellen O’Toole, autora de Dangerous Instincts. Tomar un salto de fe, te puede cambiar todo el esquema financiero. Los inversores que están demasiado confiados y hacen demasiados negocios e intercambios tienen retornos más bajos que los que mantienen sus inversiones a largo plazo, reveló un estudio.

La estrategia: Incluso si tuviste el toque mágico en el pasado, “evita decisiones apresuradas y precipitadas y mantente con las metas que comenzaste”, dice O’Toole.

Pescando mentiras

Tu pareja te promete que nunca más te mentirá o engañará… y quieres creer en él. Pero muchas personas no son muy buenas en detectar mentiras. Estudios demuestran que es difícil decir si una persona está diciendo la verdad o mintiendo. “Solo están en lo correcto un 50 por ciento del tiempo”, dice Myers.

La estrategia: Ya sea una amiga de toda la vida o tu pareja, usa tu cerebro. Toma en cuenta su comportamiento pasado, es la mejor forma de predecir un futuro comportamiento, dice Myers. Si quieres darle una segunda oportunidad, espera que te demuestre algún patrón de comportamiento que puedes creer antes de confiar en él nuevamente.



ESCUCHA TUS SUEÑOS

Las cosas que ves durante el día se almacenan en el cerebro, y a menudo, el cerebro conecta esas cosas que viste durante el día con otras ideas y pensamientos que tienes. Por ello, el sueño puede ser una herramienta útil para resolver problemas o tomar decisiones. Y es que tu cerebro está juntando las piezas y creando alternativas novedosas que nunca se te ocurrirían de despierta.


Para ello, practica la incubación del sueño, una técnica que se practica con el objetivo de aprender a “plantar una semilla” en la mente, para originar un sueño vinculado a un tópico en particular; ya sea con la intención de recrearse o bien con la intención de resolver un problema. Siendo parecida al sueño lúcido, la incubación del sueño hace focalizar la atención en una cuestión en particular. Este método es exitoso luego de haberlo practicado por un período de tiempo, así lo demostró un estudio de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard realizado por la Dra. Deirdre Barrett.


En el estudio más de un tercio de las personas reportaron que un sueño sobre el problema los guió a una solución, mientras que una tercera parte alcanzó alguna forma de solución con sus sueños. “Los sueños nos ayudan a ver soluciones que no son aparentes en nuestra mente lógica y consciente”, dice Barret quién describe en su libro, The Committee of Sleep, su estudio acerca de prominentes artistas y científicos quienes se han inspirado a través de sus sueños. La experta nos da los pasos para lograrlo. Pero recuerda que es cuestión de práctica… debes hacerlo muchas veces antes de obtener las respuestas.

3 pasos para la incubación de sueño:

1.Si quieres resolver un problema en un sueño, piensa en el problema antes de ir a dormir. Si se presenta como una imagen, mantenla en tu mente y deja que sea lo último en lo en lo que piensas antes de dormirte.


2.Para un mejor funcionamiento, construye un objeto que represente una suerte de imagen del problema (o si es una persona, usa su foto) y ponla sobre tu mesita de noche.


3.Al despertarte no saltes fuera de la cama– casi la mitad del contenido del sueño se pierde cuando uno se distrae. Permanece recostada y no hagas nada más. Si no recuerdas el sueño inmediatamente, ve si sientes alguna emoción en particular, así el sueño regresa a la mente.