“La falta de deseo ES indicio de que la cosa no está funcionando. Como dice el refrán, “El buen sexo no hace un matrimonio, pero el mal sexo (o la falta de él) sí lo puede destruir”
Alessandra Rampolla
Nno lo neguemos, todas queremos ser esa mujer… al menos por una noche. Esa chica traviesa que sorprende a su pareja con un “quickie” en el armario y que intentó todas esas posiciones sexuales. Pero aunque seas esa mujer, o lo hayas sido en un momento, estos días tu libido se marchitó. Si es así, no estás sola.
En una reciente encuesta publicada en los Archives of Internal Medicine, una de tres mujeres experimentó bajo deseo sexual durante el mes pasado. Y, mientras que los hombres pueden tomarse una pildorita azul para solucionar el problema, las mujeres no podemos despertar el deseo con una píldora mágica. Para nosotras el deseo va más allá del flujo sanguíneo.
Pero hay buenas noticias: de acuerdo a expertos, una vez identificada la causa de tu desaparecida libido, puedes encontrar una solución y aumentar tu apetito para el amor.
¿Falta de deseo?
La falta de deseo es el bajo nivel de apetencia e interés sexual a partir de la dificultad para iniciar o responder a la iniciativa de la actividad sexual en la pareja. “En otras palabras, es cuando nada te para un pelo… cuando sencillamente ¡no tienes ganas! Dicha condición puede ser primaria (cuando la persona a lo largo de su vida nunca ha sentido mucho interés o deseo sexual) o secundaria (cuando antes tenía deseo sexual, pero ya no lo tiene)”, explica la sexóloga Alessandra Rampolla en el Universo de Alessandra.
Pero, ¿por qué disminuye el deseo? Al igual que con otras dificultades sexuales, el origen de este problema, puede ser tanto orgánico como psicológico.
Confianza, el mejor afrodisiaco
Los hombres parecen tenerlo todo fácil cuando se trata de excitación sexual: se excitan, su organismo reacciona, su cerebro se apaga y sigue el goce. Pero para las mujeres es mucho más complejo: para sentir un poco de placer, nuestra cabeza es esencial. Un estudio de la Northwestern University encontró que a pesar que las mujeres pueden mostrar señales sexuales de excitación debajo de la cintura, si mentalmente no están excitadas, no sentirán nada.
Puede que estés tratando de recuperar el deseo, pero tu mente, el factor principal en la ecuación, no se detiene… no deja de analizar, preocuparse, planear. Para muchas mujeres este tipo de ansiedad las deja “cero deseo sexual”. Lo mismo sucede en mujeres que son “workaholics” .
“¿Eres una persona muy trabajadora, organizada y orientada a los logros? De ser el caso, esto podría traer consecuencias negativas a tu deseo sexual. Recuerda que el sexo es juego, diversión, relajación, placer… y seguramente no caiga entre las prioridades de tu listita de “cosas para hacer hoy”, dice Rampolla.
Además de las preocupaciones laborales, muchas mujeres son personas ansiosas y perfeccionistas que siempre están haciendo “to do lists” en su cabeza.
Problemas con la intimidad
¿Qué sucede si no deseas tener relaciones con tu pareja, pero fantaseas y tienes sexo a solas? “Problemas de confianza”, dice la terapeuta sexual Gina Ogden, autora de The Return of Desire. “Una mujer se siente vulnerable en cuerpo, mente y corazón, cuando está con un hombre. Y, si teme ese tipo de intimidad, subconscientemente evitará el sexo, y ciertamente no tendrá el deseo de tenerlo”, afirma Ogden.
Y es que los sentimientos de vulnerabilidad emocional también son culpables. “El acto sexual en pareja debe darse dentro de un contexto de seguridad emocional. Si no sientes comodidad y confianza con tu pareja, es posible que tu vulnerabilidad emocional te esté afectando”, dice Alessandra.
Por otro lado, muchos “issues” pueden tener su origen en el pasado, como una mala experiencia con el chico del cole que te forzó a tener relaciones o a una sexualidad muy cerrada en casa. Y es que psicológicamente las enseñanzas negativas y moralistas sobre la sexualidad perjudican el deseo sexual. “En aquellas mujeres que tienen deseo sexual inhibido primario, es muy común que las enseñanzas sobre la sexualidad hayan sido muy negativas y moralistas. Si no nos damos permiso para pensar en el sexo, para tener y disfrutar de nuestras fantasías sexuales, no vamos a tener deseo sexual”, afirma Rampolla.
Asimismo, muchas mujeres temen perder el control pues “temen las consecuencias de disfrutar plenamente de su sexualidad. Piensan, en algún nivel de conciencia, que se convertirán en personas inmorales o insaciables”, explica la sexóloga.
Por otro lado, la baja autoestima puede ser lo más efectivo para matar la libido. “Las preocupaciones por la imagen corporal y el no sentirte cómoda con tu figura o aspecto físico pueden causarte inhibición sexual, al querer evitar una situación de exposición del cuerpo”, dice Alessandra.
¿Qué piensa él?
Añadiendo a esta vergüenza, muchas mujeres se sienten inseguras sobre no ser sexuales (y no ayuda si tu pareja tiene una libido saludable). Hay mujeres que tienen sexo con su pareja cuando él quiere, y la inhabilidad de la mujer por alcanzar el orgasmo crea tensión en la pareja.
“Hay parejas que son pacientes y comprensivas, pero hay veces que se sienten frustrados y explotan, lo que puede llevar a ultimátums y aumentan la presión en la pareja”, explica el terapeuta sexual Ian Kerner, autor de Sex Recharge. Por ello, el experto recomienda que las mujeres con baja libido conversen honestamente con su pareja. “Debes recordarle que, aunque te das cuenta que es difícil para él, estás haciendo “todo lo que puedes para mejorar tu respuesta sexual”, aconseja. La paciencia y comprensión por parte de tu pareja ayudarán a alcanzar la meta más rápidamente. Incluso, hay veces que hacer una pausa en las relaciones sexuales es lo mejor.
“La mujer se puede sentir abrumada con sus inseguridades sexuales y necesita un pequeño descanso. En vez de tener relaciones, la pareja debe enfocarse en caricias sensuales, sin penetración ni la presión de alcanzar el orgasmo”, dice Kerner. “Acariciarse, intercambiar mensajes, besarse… es la mejor manera de funcionar fuera de la esfera sexual”.
Este es el momento ideal para encontrar maneras divertidas de darse placer sin involucrar sexo. Finalmente, la mujer debe tratar las preocupaciones que tiene respeto a su imagen corporal. “Ella debe ajustar su percepción de lo que es sexy para que así pueda sentirse sensual y sexual. Para comenzar, pregunta a tu pareja qué le fascina de ti físicamente”, dice Briton.
Trabajando juntos
“Para muchas mujeres, la ansiedad y una baja libido están ligadas. Si no eres capaz de callar tu mente, no podrás estar presente en el momento, no podrás conectarte con tu pareja, sentir deseo o alcanzar al orgasmo. Es prácticamente imposible”, explica la terapeuta sexual y de relaciones Laura Berman, directora del Berman Center y autora de Real Sex for Real Women.
Patti Britton, sexóloga famosa y autora de The Art of Sex Coaching, aconseja “re direccionar el cerebro lejos de los estreses externos y conectar tu mente a tu cuerpo”. También sugiere un baño caliente cada noche antes de ir a la cama, “te ayudará a sentirte bien en tu piel”.
Luego de aprender a desconectarte de las preocupaciones, es necesario que la mujer se conecte con su pareja. “Probablemente él no sabe lo que sucede, y menos qué hacer para ayudar a su mujer. Él quizá considera ir al terapeuta, donde ella pueda explicarle qué está pasando por su cabeza y qué es lo que le impide sentir deseo sexual”.
Britton también recomienda que la pareja se quite la ropa y “se ponga en una posición en la que estén conectados. Ahí respiren profundamente al mismo ritmo, no solo para que se relajen, pero para que se sientan más conectados”, dice. Si la mente comienza a divagar, una debe volver al momento y disfrutar cada sensación junto a su pareja.
Conéctate
Algunas veces la falta de deseo no es causada por la ansiedad o las hormonas, pero por cambios en la vida, como la muerte de un ser querido o la pérdida de trabajo.
“Cualquier cambio drástico en el estilo de vida de una pareja (matrimonio, nuevo trabajo, mudanzas, hijos) puede traer cambios en el deseo sexual, lo que en muchas ocasiones vuelve a su normalidad a medida que vayan adaptándose a las innovaciones”, reitera Rampolla.
Por su parte, Kerner explica que “el sexo para algunas mujeres es una experiencia emocional, y si quieres aumentar el deseo sexual debes nutrir la conexión con tu pareja”.
No olvides pasar más tiempo con él, mejora tu vínculo con él e incrementa la conexión, lo que a su vez, incrementa el sexo. Y planeen noches de sexo. Y es que, de acuerdo a Berman, para muchas mujeres el sexo lleva a más sexo.
Otro consejo de los expertos es una vacación romántica. Un estudio demostró que las parejas que se toman una vacaciones, una o dos veces al año, tienen mayor intimidad emocional. “Ese tiempo lejos de tu vida puede ser rejuvenecedor”, dice Berman.
Consejos de experta
La pregunta es, ¿qué hacemos para tener un rico apetito sexual? Alessandra recomienda que primero debes reconocer que existe un problema y que queremos dejarlo atrás. “Hablamos de disminución y no desaparición del deseo sexual, por lo que debe quedar claro que sí es posible recuperarlo”, dice Rampolla. La verdad es que cada caso, de acuerdo con su causa, será distinto.
“Evidentemente no se trata un deseo sexual inhibido por causas orgánicas, de la misma manera que se trataría uno que existe como consecuencia de traumas psicológicos. Lo que sí debes hacer, independientemente de la raíz del problema, es no restarle importancia al impacto negativo que el bajo apetito sexual puede tener en tu relación de pareja. Recuerda que es un problema muy manejable cuando se trabaja de la mano de un Sexólogo o Psicólogo Clínico que se especialice en el área de la sexualidad. No lo subestimes ni le restes importancia, pues puede derivar en algo más serio. ¡Recupera tus ganas!”, afirma.
Testosterona
Para mujeres con problemas de libido, los factores hormonales también pueden ser importantes. Un estudio publicado en la Journal of Sexual Medicine encontró que las mujeres que toman pastillas anticonceptivas tienen libidos significativamente más bajas que las que no la toman. De acuerdo al estudio, la dosis extra de estrógeno y progesterona incrementa los niveles de SHBG (globulina fijadora de hormonas sexuales), que hace que la testosterona se “adhiera” a tus células, evitando que la hormona fluya libremente por tu sistema, lo que puede bajar tu libido. Si tus niveles de excitación se fueron al suelo luego de comenzar a tomar la píldora, habla con tu ginecólogo sobre otras alternativas.
Algunas mujeres tienen niveles de testosterana bajos. Para analizar bien la situación, Berman sugiere que te hagas un análisis de tus niveles hormonales, y si resulta que la causa es hormonal, trabaja con un endocrinólogo para asegurar que recibas suficiente testosterona. Para algunas afortunadas mujeres, un suplemento de testosterona puede ser lo que necesitan… esa pildorita mágica.
Días del deseo
El deseo suele ser caprichoso; hay días en los que nos lanzamos sobre nuestra pareja y otros, sin que sepamos qué sucedió, nos volvemos unos “pingüinos” en la cama. Nuevos estudios demostraron que nuestro deseo sexual podría estar mucho más determinado por nuestras hormonas de que lo pensábamos.
Un estudio indica que durante los días fértiles, las mujeres tenemos un 24 por ciento más probabilidad de tener sexo y que nuestro deseo sexual llega a su punto más alto coincidiendo con la ovulación. Esto claro, es válido para aquéllas que no usan anticonceptivos hormonales.
De acuerdo a la doctora Victoria Jennings, Directora del Instituto de Salud Reproductiva y profesora de la Universidad de Georgetown, el interés sexual de las mujeres es más alto precisamente durante los días que tienen más riesgo de quedar embarazadas y que el deseo es más bajo cuando el riesgo de embarazo también lo es. De ahí que en los últimos días de la fase folicular y en los primeros de la fase lútea, muchas nos sintamos más motivadas.
Sin embargo, nada es matemático y cada mujer es diferente. Si bien la naturaleza se vale de truquitos para que nos reproduzcamos, no implica que no podamos usar trampitas para lograr que el deseo siempre se mantenga arriba: dale más tiempo al juego previo, usa lubricante si es necesario y dale rienda suelta a la imaginación, pues el cerebro es el órgano sexual más poderoso, capaz de esquivar cualquier barrera hormonal.
NÚMEROS
60%
de las mujeres quieren tener sexo seguido al principio de una relación
50%
son las mujeres que siguen queriendo sexo seguido en los últimos cuatro años.
1
de 3 mujeres reportan perdida de interés en el sexo (el doble que los hombres).
En España la empresa Nielsen Company hizo una encuesta y descubrió que
63%
dice que el estrés es uno de los principales motivos de la falta de ganas.
1 de 2
personas cree que la falta de deseo se puede solucionar.
86%
declara sentirse más feliz cuando tiene ganas de mantener relaciones sexuales.
+ del 50%
de las personas que sufren este problema perciben un distanciamiento y falta de comunicación con sus parejas.
40 a 45%
de las mujeres sufren falta de libido alguna vez en sus vidas.
76%
tomaría algún producto natural que le ayudaría a recuperar la libido. Porque aunque se pierda el deseo, las ganas de recuperarlo no se pierden. La sexualidad enriquece la vida de pareja por lo que conviene preocuparse por ella.
QUICKIE
Sal a correr en pareja, aumenta los niveles de serotonina, lo que mejora la vida sexual. Estudios demostraron que el ejercicio mejora el estado de ánimo, incrementa los niveles de endorfinas y de tu libido… además te conecta con tu cuerpo.
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