¿Cómo puedo conseguir que él sea el hombre que ocupe mi corazón, mi cama y mi hogar definitivamente? Si estás cansada de que ninguna relación te haya funcionado, pero quieres que ahora sea diferente, pon atención a los siguientes consejos:
* No pueden ser los dos A, uno debe ser B. Las parejas que más tiempo sobreviven
se acomodan en papeles distintos. Intentar ser los dos el gallo del gallinero no les traerá más que problemas. Hay que equilibrar la balanza.
* Las manías del contrario se deben incorporar a la rutina. Luchar continuamente con las rarezas de tu pareja, acaba erosionando la relación. Hazte a la idea
de que su maravilloso sofá giratorio de llamativos colores,siempre estará en tu comedor.
Así no sufrirás. “Si no puedes con tu enemigo, ¡únete a él!”.
* No intentes cambiar a tu pareja. Las personas somos como los vinilos, tenemos
nuestra cara A y nuestra cara B. Amables y rancias, según el caso y la situación.
Por ello, cuando aceptamos a alguien en nuestra vida, también estamos
aceptando tácitamente su lado B. Intentar cambiarlo es un craso error.
* Evita la erosión en la comunicación. Con el tiempo, la comunicación en pareja se va reduciendo a cuestiones domésticas (al binomio hijos/casa), lo que aboca a una relación frígida y sin ningún aliciente. Para evitar esto, nada mejor que salir del entorno del hogar. Las actividades fuera de casa ayudan a recuperar la conversación íntima, de pareja.
Un ambiente adecuado permite soltar la lengua sin reproches y estimula los “tequieros” que todos necesitamos oír.
* Sus profesiones deberán encajar a la perfección en sus vidas. Está comprobado que las personas que tienen vocaciones incompatibles en horarios o, por el contrario, son tan similares que pueden generar competición, tienen mayores posibilidades de fracasar en sus relaciones. Las actividades laborales deben ser llevaderas.
* Si no se puede repartir las tareas del hogar equitativamente, la solución pasa por buscar una asistente. La liberación liberación de la mujer ha traído consigo la duplicación del trabajo: dentro y fuera del hogar. Esta injusticia deriva en discusiones domésticas.
* No son siameses. Lo de ir a todos los lados juntos, agarraditos de la mano, se debió acabar con la adolescencia. Compromiso y libertad es el binomio perfecto, aunque parezcan dos términos antagónicos.
* Interésate por sus aficiones. Muestra algún interés en conocer lo que le gusta
y enseñarle lo que te gusta a ti. Adoptar una postura de total indiferencia
por sus gustos ociosos los separará aún más.
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